Su primer oral

Soy una morena de uno cincuenta y cinco, cabello largo negro muchos pechos hasta desde mi perectiva un poco grandes, mis medidas son 97 83 y 100cm, a este hombre con quien tuve mi primer experiencia oral, le encantaban mis pechos, y mas que le haga sexo oral, aunque era una total inexperta en el tema, él tenia unos 28 años y yo un par menos de los que hoy tengo, es un hombre muy grande de contextura física fuerte y me daba la sensación de cuidado con su sola presencia.
Nos habíamos conocido no importa como, pero vivíamos en distintas ciudades, y eso era una complicación para poder calmar nuestro fuego interno, nos vivíamos llamando y dándonos indirectas con frases como que yo decía que estaba comiendo una manzana y la comia despacio y suave chupaba todos sus jugos y saboreaba cada unos de ellos con los ojos cerrados, todo eso lo calentaba muchísimo.
También hacia en plan de modelo y mandaba fotografías por correo electrónico, en un principio con ropa “discreta” pero con poses sugerentes donde resaltaba el escote de mi pechos, según el, en ninguna de esas fotos se podía ver con claridad mi cuerpo, entonces entendí como una habilitación a mostrar un poco mas.
Fui a bañarme a depilarme todo lo que yo consideraba en esos momentos como indebidos vellos, y después coloque uno de mis conjuntos de ropa interior color blancas, era una tanga común que tapaba dentro de todo mis nalgas pero las levantaba , mas de niña mala que de mujer pasional, y un sostén simple que levantaba mis pechos, pude sacarme fotografías después del baño con el cabello mojado y cara lavada, es lo que mas le gusta a él, desde arriba donde se veían mis pechos completamente y luego de costado donde eran mis pechos y mi panza y mi rostro el que se podía ver, y por ultimo una de mi trasero.
Al recibirlas y mirarlas me dijo que tenía un trasero deliciosos que le encantaba ese lado fogoso que se iba despertando en mi, y que por ciento en esos momentos yo era completamente virgen, solamente había visto alguna que otra peli porno pero no iba más allá de ello. Y era él quien iba a descubrir mis sentidos sexuales y despertares en la anatomía masculinas.
Después de haberle mostrado estas fotos me anime y al descubrir que hace un par de meses estaba dedicada en mi tiempo entero hacia como seria su mirada ante mi cuerpo, me anime y envié fotos muy sexuales diría yo mas que sexys, estaba completamente desnuda de piernas abiertas, con un dedo en la boca chupándolo con cara de golosa come penes, y muchas en donde estaba en cuatro patitas como perra, y se podía distinguir el hoyito pequeño y prieto de mi ano y también los grandes y oscuros labios de mi intimidad, hacer esas poses tan sexuales me calentaba muchísimo y en mucha de ellas se veía un pequeño brillo de mis jugos, y en muchas me imaginaba que era él quien estaba detrás de mi metiendo su pene en mi vagina, donde me entraba muy apretadito y rico.
que eran desatada en el sexo, me dijo muchas cosas, como que quería ser el que con sus dedos y su boca hicieran que esos flujos salieran de mi intimidad. Y así la pasaba durante mucho tiempo enviándole fotografías muy sexuales mías, y un día me dijo que vendría a visitarme, tendría sus vacaciones y vendría por unos cuantos días de su ciudad a la mía, y yo aproveché para invitarlo a una fiesta que daría una amiga, con gusto acepto.
Llego una día viernes por la mañana a mi casa en la cual yo estaba justamente pasando el día con mis padres, eso complico un poco las cosas, pues solo se los presente como un amigo que andaba de paso y nada más, para no preocuparlos ni mucho menos. Paso todo ese día en mi casa comiendo bebiendo y hablando con mis padres y también conmigo, aunque debo confesar que estaba yo muy nerviosa de tenerlo tan cerca después de tantos momentos de espera, y tener que seguir esperando me colocaba en una situación aún peor.
Llego el tercer día, el se quedaba alojado en un hotel del centro de la cuidad, iba de visitas pero como mi madre estaba en medio no podía pasar nada entre nosotros. Ya cuando se fue mi madre, estábamos en la tardecita, después de haber almorzado, le sugerí que laváramos un poco de ropa sucia que el tenia ya de los días anteriores mas toda mi ropa de la semana.
Estábamos ya levantando la ropa cuando entrabamos en mi habitación para ordenarla, cuando lancé toda la ropa que tenía en las manos a la cama, y nos dimos uno de los mejores besos largos y pasionales que sentí, fue tan espontaneo que me dio un poco de miedo, pero estaba muy segura de lo que hacía, mientras mi mano bajaba hasta poder masajear su pene que estaba ya un poco duro por los besos que nos estábamos dando, y es allí donde decidí arrodillarme, y él me ayudo a sacar su órgano sexual de su interior y un olor a hombre embriago mis sentidos, empecé a acariciar su pene, lo escondía y lo volvía a sacar dentro de su capullo donde él me iba guiando para que lo hiciera correctamente, y de la nada me lo metí en la boca y lo chupe despacito, luego mas fuerte y mas fuerte, podía escuchar como su voz me largaba pequeños quejidos de placer, y agarraba con una de sus manos mi cabeza para que metiera mas profundamente su pene en mi boca. Luego de un rato jugando con su pene y chupar y succionar con cada jugo que salía, con un gusto salado, mientras que él estiraba las manos para poder tocar uno de mis pechos poder sentir sus manos llenas de lo que él decía era lo mas rico, cuando después de un momento sentí como todo el grosor de su pene iba en aumento y me separo de su pene para largar todo su semen en mi cara, en mis mejillas y en mi barbilla y un poco en el escote de mis pechos.
Ya después seguimos con el dia normal y fue en la noche que disfrute de que me dieran mi primer oral. Pero eso es otra historia aparte.