[Amor Filial] Carretes en Familia (historia real)

Típico que uno tiene un pariente que te sigue a todos lados, que hace lo mismo que tu que un poco más es tu sombra, en mi caso ese pariente es mi prima.
Soy hijo único y nuestros padres siempre se preocuparon de criarnos casi juntos de tener una relación de casi hermanos, por ende ella es aparte una de mis mejores amigas.

Por lo general carretiabamos juntos, así mi tío se aseguraba de que yo la podía cuidar y a ella le agradaba que conociera a sus amigos y hacer buenas migas. Un día nos toco un carrete fome y justo despues de mucho tiempo sin vernos así que nos dedicamos a conversar y ponernos al día a contarnos historias y ver que onda cada uno con su vida, además estando conmigo evitaba que los jotes siguieran molestandola.

Nos fuimos temprano porque al final el mambo no cundió, era media noche sin nada que hacer así que nos fuimos a su casa. Nos pusimos a tomar (lo que sobró del carrete) cantar y webiar con las guitarras mientras seguiamos hablando de weas, esta vez amorosas y algo de experiencias sexuales, por lo general ella me interrogaba a mi ya que me daba lo mismo hablar con ella de esas cosas, pero si me daba pudor y algo de cosa preguntarle a ella, cuando me incitaba a preguntarle le decía que no porque seguramente quedaría corto al comparar mis experiencias con las suyas, molestandola obviamente, ella se reía.

Ya casi a las dos de la mañana llama mi tío avisando que no llegarían hasta la mañana ya que se fue de fiesta con sus amigos y preferían dormir allá antes que pegarse el pique hasta su casa, seguramente se fue de copas y prefirío ahorrarse un accidente. Así que le dije a mi prima para que me pasara unas sabanas e ir a preparar cama de huéspedes, le dio flojera, echó una mirada rápida y no encontró nada, yo algo molesto le dije que filo (era invierno y la habitación era bastante helada la verdad pero estaba tan cansado que me daba lo mismo).

En eso cuand me despedía me dijo que no fuera tonto su cama era grande que le daba lo mismo compartirla conmigo y ni tonto ni peresozo acepte. Me fui a lavar los dientes y a la vuelta mi prima ya estaba acostada y durmiendo, así que me saque la ropa hasta quedar en boxers y polera para así acostarme.

Creo que dormí menos de hora cuando siento que mi prima se comienza a mover quitandome espacio, lo cual me molestaba un poco ya que me gusta sentirme algo libre cuando estoy acostado, así que me acomodé de tal forma que ella no me molestará pero no duró mucho ya que ella se puso encima mio y acomodó su cabeza en mi pecho. "Linda la wea" murmuré algo enojado, pero lo deje pasar, cuando alisté a dormirme sentí como puso sus piernas encima de las mias y su mano bajo mi estómago, no le dí mucha importancia ya que el sueño me ganaba, pero de un momento a otro me comencé a urgir ya que el amigo se paró, y su mano cada vez más cerca de el me ponía nervioso, creo haber estado 10 minutos esperando acomodarme hasta que finalmente pude darle la espalda y quedarme dormido, antes de cerrar los ojos vi la hora, 3:40 am y aún no podía dormir.

Despúes de un rato despierto ya que sentía que mi prima se movía mucho y cuando me doy cuenta siento todo su poto en mi campeón y sin alcanzar a reaccionar ella se dá vuelta para mirarme y decirme:
- "Shhhh cero respeto con tu prima" - largandose a reir. La vergüenza se apoderó de mi unos instantes y no supe que hacer.
Me miró y siguió riendo.
- "No te preocupes si no me molesta tanto" - yo sólo atiné a pedirle perdón nada más - "Ayy no seai cuatico si filo, no hay drama. Además sabía que te gustaba pero no tanto" - ante esas palabras ambos nos reímos.
- Le das color si igual es normal, no es algo que se controle además ni tan rica eres - Le dije algo picado, para pasar la verguenza.

Nos quedamos mirando un rato sonriendo sin hacer nada, en eso sentí como sus manos suavemente se deslizaron por mis boxers hasta llegar a mi miembro. La verdad no atiné a decirle nada solo la miraba y me concentraba en lo que hacía con las manos.
- "Sientes lo que te hago?" - Me preguntó mientras se acercaba un poco a mi.
- Claro, pero no es un juguete no seas tan brusca - le dije al encogerme un poco al sentir lo que hacía con sus manos.

Me tumbó de espalda y puso una fracción de su cuerpo encima mio mientras seguía tocandome y esta vez masturbandome de a poco. Se notaba en su cara lo concentrada que estaba, al parecer no era la primera vez que lo hacía, trataba de hablarme pero yo no escuchaba estaba demasiado pendiente en lo que me hacía y de a poco disfrutandolo cada vez más. A los pocos minutos ya me encontraba caliente y no pude evitar tocarle su vagina la cual estaba demasiado mojada pero rica, me puse a jugar con su clítoris todo mientras nos mirabamos sin parpadear.
De un momento a otro le saque la polera y comencé a besar sus pechos que aunque pequeños eran ricos y duritos y su carita de placer cada vez me ponía más duro.

Sin darme cuenta la levante y la tiré en la cama y me dedique hacerle sexo oral, lo cual me exito demasiado y pese a que al principió no quería se termino dejando llevar, hasta que ya no pudo más y se dedicó a masturbarme hasta que me fuí en sus manos.

Recuerdo que nos fuimos a lavar juntos y mientras me limpiaba el miembro ella se lavaba las manos en eso al ver su poto se lo comencé a rozar y llevar peligrosamente mi herramienta hasta su sexo pero de pronto me bajo la culpa al vernos al espejo, así que me detube me termine de lavar y le dí un abrazo. Cuando estabamos acostados le dije que había sido rico a lo que ella me respondió que si, mucho, la abracé y dormi un par de horas...

A la mañana siguiente la desperté porque había preparado desayuno y actuabamos como si nada había pasado, a lo que llegaron mis tios y todo normal, pasarían algunos años antes de volver a tener otro encontron similar, y hasta el día de hoy cuando mi prima está curada y sola me lo recuerda.