Comunidad judía en ee. Uu. Contra las campañas de israel para sus emigrantes

Uno de los anuncios publicitarios patrocinados por el Gobierno israelí y difundidos a lo largo de Estados Unidos, con el objetivo de repatriar a sus emigrantes, muchos de los cuales residen en ese país, parece que no lograron su propósito. Es más, la idea ha despertado una fuerte polémica en la comunidad hebrea, cuyos integrantes hasta la llegaron a odiar.

La publicidad, en la que un niño llama en inglés a su papá israelí que está durmiendo, y éste reacciona sólo cuando su hijo cambia el idioma a hebreo, ofendió a la citada comunidad, porque según ellos, su mensaje es de que la identidad judía israelí es más pura que la de la comunidad judía norteamericana.

“Lo que más me molestó de los anuncios publicitarios es que su objetivo casi era sembrar miedo, intimidar a la gente que vive aquí (en EE. UU.)”, asegura Gal Beckerman, autor del libro ‘Cuando ellos vengan por nosotros, ya no estaremos’.

En otro anuncio los abuelos israelíes de una niña estadounidense la preguntan que fiesta es, y la pequeña responde que es la Navidad en lugar de decir que es la fiesta judía de Chanukah. La conjetura, es que la identidad judía se está diluyendo en Estados Unidos, un hecho que también indignó a muchos hebreos que viven allí.

Yossi Gurvitz, periodista y bloguero de Tel Aviv, dice que “Israel sabe que necesita el apoyo de los judíos estadounidenses, y no puede permitirse insultarlos ahora o distanciarse de ellos”.

La comunidad hebrea estadounidense a menudo está abierta a una práctica menos ortodoxa del Judaísmo que en Israel. La brecha entre las dos comunidades lleva años creciendo y esto se debe en mucho a la política agresiva de Tel Aviv hacia los palestinos.

El conflicto por ahora no muestra señales de compromiso alguno, y los consecutivos gobiernos israelíes no han sido capaces o no han estado dispuestos a alcanzar un acuerdo con la autonomía haciendo que muchos judíos norteamericanos se sientan más alejados de Israel.

Rebecca Caspi, directora general de la oficina israelí de las Federaciones Judías de América del Norte, considera que lo que sucede en el ámbito público israelí no preocupa a muchos de los judíos norteamericanos.

Los anuncios fueron designados para estimular a los israelíes que viven en EE. UU. a volver a casa. Pero muchos apuntan a que los videos huelen a arrogancia, ignorancia y falta de respeto cultural.

“Muchos de los judíos estadounidenses al observar lo que pasa en Israel y, particularmente, lo que se desarrolla en el parlamento, se sienten extremadamente ajenos a ello. Y dicen a sí mismos: No es el Israel del que nos enamoramos, no es el estado que queremos defender”, afirma Beckerman.

Se estima que un millón, o sea, uno de cada ocho israelíes viven fuera del país. En los últimos cinco años la cantidad de personas que optaron por dejar su Patria superó a los que quieren regresar y vivir en Israel. Los anuncios según muchos no solo fracasaron en motivar a los expatriados a volver, sino que tampoco han podido explicar por qué muchos abandonaron su país.