Otro día negro para la economía de Europa

Italia rompió un récord al pagar 7,8% por sus bonos a corto plazo. Bélgica, por la misma incertidumbre, también colocó deuda más cara. Hungría perdió el grado de inversión. Los mercados europeos caen hasta 2 por ciento


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La crisis de deuda soberana que afecta a la zona euro no da tregua a Italia. Esta vez para conseguir financiarse en el mercado ha tenido que doblar los intereses de su anterior subasta de letras a seis meses y multiplicar por cuatro los pagados en la anterior subasta de bonos a dos años.

El tesoro italiano ha conseguido colocar 8.000 millones de euros de letras a seis meses a un interés del 6,5%, casi el doble de lo que tuvo que pagar en la anterior subasta el 26 de octubre cuando el interés fue del 3,53 por ciento. Además, ha colocado otros 2.000 millones de euros en bonos a dos años a un interés del 7,8% muy por encima del 2,01% conseguido en la anterior subasta.

El BCE para tratar de frenar la presión ha estado comprado deuda italiana en el mercado secundario, según han confirmado dos fuentes conocedoras de la operación a Bloomberg.

Estas subastas son las primeras que debe afrontar el Gobierno de tecnócratas del primer ministro italiano, Mario Monti, que asumió el cargo la semana pasada. Monti continúa tratando de devolver la credibilidad al país por lo que prosigue su gira europea.

Siguiendo con la tendencia de los últimos días, aunque de forma más leve, los mercados han vuelto a castigar a Bélgica, que ha visto cómo esta semana su prima de riesgo, que mide el diferencial entre el bono nacional a diez años y el alemán del mismo plazo, superaba por primera vez los 350 puntos básicos.

La razón, según la mayoría de analistas, es la incertidumbre política que vive el país, gobernado desde abril de 2010 por un ejecutivo en funciones y nuevamente encallado en las negociaciones para formar un nuevo Gabinete.

Por último, la calificadora Fitch le hizo perder su nota de grado de inversión a Hungría, que la semana pasada pidió auxilio financiero al FMI y la UE.

Su nota pasó de Baa3 a Ba1 con perspectiva negativa.