Con el aval ruso, el Consejo de Seguridad de la ONU podría condenar a Siria

Moscú, aliado del régimen de Bashar Al Assad, modificaría su postura y apoyaría, con reservas, un documento. Queda por definir la postura de China, que mantiene derecho a veto. La propuesta de Brasil es la que más avanzó


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Por segundo día consecutivo, los miembros del máximo órgano de seguridad de la ONU continúan con las negociaciones para lograr que, por consenso, se condene la violenta represión del régimen contra los opositores prodemocráticos, que en los últimos días se cobró más de 150 vidas.

Las conversaciones parecían estancadas el lunes, ya que tanto Rusia como China -dos de los cinco países que tienen derecho a veto- se oponían a firmar una resolución en ese sentido e, incluso, amenazaron con bloquearla. Por su parte, Brasil, India y Sudáfrica hicieron saber que estaban en contra de una mera declaración.

Fuentes diplomáticas dejaron entrever este martes que el escenario sería otro, ya que la resistencia de Rusia no sería tan tajante. Sergei Vershinin, funcionario del Ministerio de Exteriores, señaló que su país no está categóricamente en contra de una resolución de la ONU sobre Siria, cuestión que condicionó que no haya sanciones. "Si hay algunos temas desequilibrados, sanciones, presión, creo que esa clase de presión es mala porque queremos menos derramamiento de sangre y más democracia", dijo.

En tanto, las delegaciones de Brasil y Reino Unido intentaban conseguir apoyos para la propuesta que consensuaron y que introduce aspectos destacados por el país sudamericano en un documento anteriormente presentado por los representantes de Europa en el Consejo.

"Ambas delegaciones siguen trabajando y seguiremos analizando el contenido de las iniciativas. Puedo decir que el debate en el Consejo de Seguridad es serio y que se han hecho muchos esfuerzos independientemente de si todo acaba en la forma de una resolución o no", explicó el presidente de turno del Consejo y embajador indio ante la ONU, Hardeep Singh Puri.

Las propuestas presentadas por Brasil son "bastantes cercanas" a la condena propuesta por los países europeos y apoyada por los Estados Unidos, explicó a EFE el embajador alemán adjunto ante la ONU, Miguel Berger. Detalló que la idea recalca "la condena de la violencia, la necesidad de que se investiguen los crímenes y de que exista un acceso al país para los equipos humanitarios de la ONU".

"No estamos tan alejados. Hay muchos puntos en los que todos pensamos lo mismo, tenemos la misma preocupación y por eso vamos a seguir trabajando para lograr que la sustancia de la condena sea la que deseamos", añadió Berger, quien no espera que los miembros del Consejo alcancen un acuerdo este martes.

Según el diplomático, el debate de este martes se centra en la forma en la que hablará el órgano, que puede adoptar una resolución, aprobar una declaración presidencial o bien emitir un comunicado de prensa.

Respecto a la violencia desatada en los últimos días en Siria, el secretario general de la ONU, Ban ki-moon, dijo que el presidente sirio Bashar Al Assad había "perdido toda humanidad". La violencia del fin de semana es "totalmente inaceptable" y Assad debe "ser consciente de que es responsable ante el derecho internacional", agregó.

Aunque la condena internacional se ha hecho sentir (algunas países adoptaron sanciones de manera unilateral), no se prevé una intervención militar como la que la OTAN lanzó en Libia. El militar estadounidense de mayor rango pidió el fin de la violencia, pero sólo era evidente la presión diplomática. "No hay señales de ningún tipo de que nos vayamos a involucrar directamente con relación a esto", dijo el almirante Mike Mullen, jefe del Estado Mayor Conjunto estadounidense en Bagdad.

La Alta Comisionada de la ONU para los derechos humanos advirtió a las autoridades sirias que el mundo estaba observando la violencia y dijo que quienes violaron los derechos humanos deben pagar por ello.

Por su parte, Italia citó el martes a su embajador en Siria en protesta contra la "horrible represión de la población civil" e instó a los miembros de la Unión Europea a hacer lo mismo. La UE formalmente agregó a otros cinco funcionarios sirios a una lista de 29 individuos encabezada por Assad, a quienes el bloque de 27 naciones ha sancionado con un congelamiento de activos y restricciones de viaje.