La corrupción y el narcotráfico corroen la imagen de Evo Morales

Tras seis años de gestión, el presidente enfrenta su peor crisis de aprobación. Los bolivianos bajaron la calificación del gobierno, al que por primera vez "suspendieron"


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Un sondeo de la firma Ipsos, Opinión y Mercado, indicó que los bolivianos calificaron con un 2,8 el desempeño del gobierno, en una escala que va del 1 al 5. El resultado confirma la estrepitosa caída del apoyo que sufre desde hace meses el presidente Morales.

En los primeros dos años de gobierno (2006 y 2007), la calificación había sido de 3,3, mientras que en los dos siguientes bajó a 3,0. El gobierno había experimentado un leve repunte en 2010, hasta alcanzar un 3,2, al comienzo de su segundo mandato.

Sin embargo, algunas medidas impopulares recientes -como el intento de aumentar el precio de los combustibles a fines del año pasado- han provocado que la aprobación descienda hasta 2,8, lo cual ha llevado al gobierno a ser por primera vez "suspendido", con una calificación negativa.

La encuesta de Ipsos, dada a conocer por el diario El Día de Santa Cruz, consultó este año a 1.032 mayores de edad en las cuatro mayores ciudades del país (Santa Cruz, La Paz, El Alto y Cochabamba) y la calificación es el promedio de respuestas entre el uno (muy mala) y el cinco (muy buena).

La consultora indagó también sobre lo que los bolivianos consideran "el problema más grave" de Bolivia: un 22 % apuntó contra el narcotráfico, mientras que una cifra equivalente optó por el desempleo; la corrupción, con un 19 %, quedó en tercer lugar.

Desde que intentó imponer el llamado "gasolinazo" en diciembre, medida que debió anular ante los reclamos, el gobierno atraviesa un creciente descontento que se ha manifestado en las encuestas.

Las últimas semanas estuvieron protagonizadas por violentas protestas de los principales sindicatos, que reclamaban un aumento salarial superior al que el gobierno se decía dispuesto a conceder. Ambas partes alcanzaron un acuerdo provisorio días atrás.

Otra encuesta indicó a comienzos de abril que de celebrarse elecciones en ese momento, Evo Morales apenas contaría con el apoyo del 22% del electorado.