DeNunCianDo - Consecuencias del ‘gota a gota’

Un nuevo intento de desalojo en el barrio La Esmeralda, en Popayan.

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Ayer fue un día de preocupación para los habitantes de la calle 5ª, mientras al interior de la vivienda de la señora Aura Valencia se llevaba a cabo una nueva Audiencia de desalojo, afuera los vecinos protestaban por el acto que califican como injusto.
Preparando arepas para sobrevivir y cargando a diario con la preocupación de perder su casa pasan los días para la señora Aura Valencia.
Como hace un año, junto a su familia, entre ellos dos menores de edad, ayer vivió una nueva Audiencia de desalojo, como consecuencia de un préstamo de siete millones de pesos que 12 años atrás reali*zó.
Con voz entrecortada y profundo arrepentimiento, doña Aura recuerda que todo comenzó cuando necesitaba comprar un eternit y decidió ir hasta donde el señor Froilán Montilla para que le prestara el dinero. “Yo alcancé a pagarle siete cuotas, una veces me daba recibo y otras me decía que no tenía y dejábamos así; luego yo me alcancé y empecé a quedarle mal, la deuda creció y él me hizo firmar unas letras y una hipoteca, luego pasó el tiempo y remataron mi casa”.
Comenta además que nunca pidió asesoría a la hora de firmar los documentos y que por temor y desconocimiento confió en su prestamista. Ahora aunque propone darle la mitad de su casa como forma de pago, el señor Montilla insiste en recuperar lo que jurídicamente es suyo.
“Se que cometí un error* por confiada, pero si me quitan la casa no tengo para donde ir, yo estoy enferma y a esta edad nadie me da trabajo para poder sacar adelante a mis nietos”, dijo la abuela que proveniente del Chocó llegó a Popayán para estudiar en la Normal de Señoritas.
Por su parte, los vecinos rechazaron el desalojo, pues según argumentan todo es parte de un engaño, no es la primera vez que este prestamista le quieta la casa a alguien.

Modo en que operan los usureros:
-Se prestan desde $100 mil en adelante. Al deudor no se le exige más que la firma de una letra en blanco y la fotocopia de la cédula para acceder al crédito.
-Cumplido este paso, el cual no demora más de cinco o 10 minutos, el deudor recibe el dinero que solicitó.
-El interés mensual sobre cualquier monto que preste el deudor es del 10%. Si es a dos meses es del 20%.
-Debe pagar una cuota fija diaria, dependiendo de la cantidad que prestó, la cual incluye intereses y capital.
-Por ejemplo, si prestan $100 mil a dos meses, el deudor debe pagar 60 cuotas diarias de $2.000, incluyendo sábados y domingos.
Lo que dice la Ley
Según el artículo No. 305 del Código Penal, alguien incurre en el delito de usura cuando recibe o cobra, directa o de manera indirecta, a cambio de préstamo de dinero, una utilidad o una ventaja que exceda en la mitad del Interés Bancario Corriente, que para el período correspondiente estén cobrando las corporaciones financieras.
Quien cometa el delito del ‘Pagadiario’ debe ir a la cárcel por un tiempo que va de 2 a 7 años, sin contar una multa que oscila entre los 50 y los 300 salarios mínimos legales vigentes.

Parte y contraparte
Henry Ruiz Tosse, abogado de oficio de doña Aura Valencia, explicó que el procedimiento jurídico que se desarrolló en este caso no contempló que su defendida pagó algunas cuotas del préstamo y que la firma de la hipoteca se hizo sobre engaños. Circunstancias que hicieron que se interpusiera una demanda contra el señor Froilán y que deja una oportunidad de conciliación.
Adicionalmente, anotó que es necesario tener en cuenta el mal estado de salud de la afectada y la presencia de dos menores de edad en la casa, así que solicita que el caso lo revise un Juez Civil.
Recomendó además que para que no sigan ocurriendo casos como éste, quienes pidan dinero no se dejen atemorizar del acreedor y que nunca firmen sin antes recibir asesoría.
Acercarse a un consultorio Jurídico, hacerse parte del proceso de defensa y avisar a las autoridades cualquier anomalía, también son consejos útiles para que un préstamo no pase a ser un problema.
el liberal.com