El primer avistamiento de James

Sigo preguntándome como muchos: a cuento de qué se fichó a James. Sí, se puede considerar que es el fichaje de la temporada, pero también el encarte de la temporada. Ancelotti la tiene complicada para buscarle sitio, salvo que deseche el tridente de la temporada pasada que, a propósito, preocupa con un Benzema improducitvo y la negativa de fichar un nueve como Falcao.

Su papel de media punta es ocasional y Ancelotti trata de que encaje en el medio con Modric y Kross y un Xavi Alonso cuya decadencia natural arrastra al equipo, pese a algunos chispazos que no consiguen ocultar sus carencias actuales. ¿Reemplazo de alguno? ¿Xavi en la banca y por delante de los otros dos? Y lo peor del cuento es que no puede sentar a un fichaje de 80 millones. No lo permite Florentino.

Recuerdo en la temporada pasada cómo Florentino obligaba a la alineación de Illarramendi y Ancelotti lo ponía como emergente sin que diera resultado alguno.

James brilló en el primer tiempo, por la ausencia de Cristiano que obligó a que subiera un poco. Pero con la entrada del portugués, de nuevo atrás y todos vimos como se apagó en el segundo tiempo.

¿A dónde irá a parar James?

Cita:

El primer avistamiento de James James Rodríguez mostró en la primera parte contra el Atlético su versión más reconocible, para diluirse tras el descanso cuando tuvo que retrasar su posición James Rodriguez recibe instrucciones de Ancelotti, en la vuelta de la... James Rodriguez recibe instrucciones de Ancelotti, en la vuelta de la Supercopa. JUAN MEDINA REUTERS ANDRÉS ARAGÓN Actualizado: 23/08/2014 12:35 horas Apareció sin preaviso en el Vicente Calderón. Los problemas musculares de Cristiano Ronaldo abrieron un hueco en el tridente de ataque y allí estaba, James Rodríguez en su versión más reconocible desde que llegó al Real Madrid. El colombiano empezó en la banda izquierda, pero fue cuando agarró libertad como mediapunta cuando dejó sus mejores destellos. Tendió hilos entre líneas, protagonizó las jugadas de mayor peligro en la primera parte como asistente y sólo se apagó cuando los cambios al descanso le obligaron a retrasar su puesto. La irrupción de James Rodríguez coincidió con el momento de mayor confusión en el Atlético, la jugada que terminaría con la expulsión de Diego Pablo Simeone. Y nació en el que sería el mejor centro de operaciones blancas en el primer acto, la banda derecha. Carvajal culminó una gran combinación en ese costado con un pase al espacio que James Rodríguez controló -en posible fuera de juego- a la espalda de la defensa. El colombiano tuvo un mano a mano que Miguel Ángel Moyá frenó con la yema de los dedos. El balón quedó muerto a medio metro de la línea de gol, pero el Real Madrid vivió a partir de esa jugada sus mejores minutos del partido. James, trasladado a la mediapunta, entró en estrecha colaboración con Luka Modric, Gareth Bale y Carvajal. Tendió puentes con Xabi Alonso y encontró entrenamiento con Karim Benzema. Fue junto al croata una pieza esencial para que el equipo blanco deshiciera con balón la enrevesada madeja defensiva del Atlético, un faro siempre encendido en la frontal del área. Un motivo de desequilibrio. Un cabezazo a centro de Carvajal salió a unos centímetros del poste. Un latigazo desde la frontal acarició la escuadra. Y su asistencia tras control orientado en la media luna preparó un mano a mano que Gareth Bale echó junto a la madera. "James fue el más peligroso de nosotros en la primera parte", subrayó Carlo Ancelotti en rueda de prensa. Un brillo que se perdió al descanso con la entrada de Cristiano Ronaldo por Toni Kroos. Un solo movimiento de ficha desestabilizó al Real Madrid. James Rodríguez debía retrasar su posición para mantener la formación de tres en el mediocampo, pero en la práctica el equipo blanco se partió en dos: la medular quedó reducida a Xabi Alonso y Luka Modric y al tridente le salió una punta de más que no encontraba su sitio. El colombiano, visiblemente perdido en la segunda mitad, acabó siendo sustituido. "En la segunda parte, con la entrada de Cristiano Ronaldo, tenía que tener una posición más retrasada. He cambiado la posición de los medios y hemos tenido dificultades para tener la posesión, por eso he puesto a Isco", explicó el técnico italiano tras el partido. La derrota contra el Atlético de Madrid dejó la versión más reconocible de James Rodríguez, pero ese rol del colombiano, en el que más cómodo se ha encontrado hasta ahora, choca con un tridente que la temporada pasada devastó Europa. Será el examen más exigente de este curso para la pizarra de Carlo Ancelotti.

Fuente: El Mundo