Falcao y su partido perfecto

Es cierto, Messi es de otro planeta con números estratosféricos, pero en los de este mundo Falcao está en primerísimo lugar, en esa élite donde sólo llegan los fuera de serie, los destinados a dejar huella como el propio Müller que duró 40 años con un registro de goles casi imbatible.

Eso se puede decir de Falcao, un depredador en el área y si a figuras nos vamos, es como los velociraptors del pasado, resucitados en Jurasic Park, esos asesinos insaciables, imposibles de detener, siempre hacia adelante en busca de su presa.

Pero aparte de su hambre goleadora, sus recursos lo hacen aún más grande porque marca de todas las formas posibles, con ambas piernas, de cabeza, de tiro libre, de penalti y verlo luchando en el área con sus marcadores es una fantasía por sus quiebres de cintura, sus cambios de ritmo, su visión del arco y sus inventos indescifrables a la hora de rematar.

Y si a esto le agregamos su comportamiento fuera de la cancha donde es todo un caballero, tendremos el perfecto ejemplo de un deportista integral que se gana el cariño de todos.

Cita:

FALCAO REMATÓ CINCO VECES ANTE EL DEPORTIVO Y LAS CINCO FUERON GOL El partido perfecto Su porcentaje de acierto es superior al de Cristiano Ronaldo y Messi En 2012 ha logrado 43 goles en 44 encuentros DAVID G. MEDINA. MADRID 11/12/12 - 08:44. Cinco disparos, cinco goles. Pocas veces en la historia un jugador, en este caso un delantero, había logrado un nivel de efectividad tan elevado, tan brutal. Lo hizo Radamel Falcao ante el Deportivo, en un encuentro que pasará a la historia del Atlético y también a la del fútbol español, que no veía algo semejante desde que Fernando Morientes anotó otras cinco dianas en la campaña 01-02. La manita para la leyenda se completó de todas las maneras posibles. Con la pierna derecha ajustando el esférico al palo, con un trallazo desde fuera del área que hizo inútil la estirada de Aranzubia, de penalti cometido sobre él mismo, de cabeza jugándose el físico y, para acabar, tras dejar atrás a varios defensas con velocidad y fe en sus posibilidades. El delantero total, en definitiva. El punta que todo lo que lanzó a puerta terminó con el balón en las redes deportivistas. Tras la exhibición ante el Deportivo, Radamel Falcao se aupó a la segunda posición del Pichichi. Sus 16 goles pulverizan los 13 tantos que lleva la estrella del gran rival, Cristiano Ronaldo. Sólo el registro sideral de Messi, 22 goles, supera uno de los inicios anotadores más espectaculares de la historia del Atlético. La balanza, cierto es, se decanta del lado de Falcao cuando hablamos de efectividad. Y no sólo en el partido ante el Deportivo. Con los números en la mano, el delantero colombiano supera con creces en esta faceta de la Liga a los dos jugadores más mediáticos del momento. Sus 16 tantos han llegado tras disparar apenas 27 tiros entre los tres palos. Messi ha necesitado 43 ocasiones para anotar 23 tantos, mientras que Cristiano ha lanzado a puerta 50 veces, de las que sólo 13 acabaron en gol. El mejor porcentaje, por ahí, es para Radamel, que convierte un gol cada menos de dos disparos a puerta. Si hablamos de remates totales, la diferencia se acrecienta. Falcao apenas ha tirado 50 veces, por las 79 de Messi y las 108 del delantero portugués del Real Madrid. Incluso Iago Aspas, delantero del Celta, ha intentando más veces el gol que el cañonero del Atlético, con 55 disparos. Unos números de leyenda Con la manita del domingo, el delantero colombiano, a falta de dos partidos de Liga y uno de Copa para que concluya el año, presenta un balance demoledor en este 2012, toda vez que ha logrado 43 goles en 44 partidos. Algunos de ellos, además, fueron decisivos para levantar los títulos de Europa League, dos tantos al Athletic, y Supercopa de Europa, tres al Chelsea. En ambos casos fue nombrado mejor jugador de las finales. Apenas lleva 16 meses en el Atlético y Falcao ya presenta una tarjeta goleadora que para sí quisieran algunos de los grandes delanteros que han vestido la rojiblanca. Sus 55 tantos en 64 partidos han llegado de todas las formas posibles.

Fuente: Marca