8 grandes inventos por accidente

Hay gente que se pasan años tratando de inventar algo que les cambie la vida, que los haga millonarios y no logran dar en el blanco. Sin embargo, hay otros que descubren productos que pasan a la historia y se transforman en algo cotidiano para muchos solo por accidente. Descubre cuáles fueron estos inventos por accidente que nos cambiaron la vida.


Un ingeniero llamado Percy Spencer estaba trabajando con un dispositivo de magnetrón, que suelen ser usados para los radares militares. En un momento se dio cuenta que las golosinas que llevaba en el pantalón se estaban cocinando por la radiación. Así fue cómo en 1945 inventó el microondas.


Un día, allá por 1905, un chico de 11 años bastante desordenado estaba tratando de hacer una bebida refrescante. Se cansó y dejó todas las cosas a la interperie. Después de una noche helada, se encontró con que el líquido estaba congelado y el palo que usaba para revolver los ingredientes pegado. La creación: el helado de hielo.


En 1853, un chef de nombre George Crum se cansó de las quejas de un cliente porque sus papas al horno no estaban crocantes. Para no escucharlo más corto las papas en tiras bien finitas, las tiró en aceite hirviendo, les puso un poco de sal y se las acerco a su comensal. El resultado: las papas fritas o "Saratoga Chips", como las llamaron en honor a su pueblo de origen.


Unos científicos casi por casualidad notaron que algunos pacientes que tomaban "Loniten", un medicamento para la presión arterial, les crecía considerablemente el pelo ¿además de que se le notaba un mayor grosor en el mismo-. De esta forma, crearon un producto para combatir la caída del cabello: el "Rogaine".


Ruth Wakefield trataba de hacer una torta de chocolate para los inquilinos en su hotel de Massachusetts. Siguió bien la receta, arrojó los chips de chocolate, pero estos no se derritieron cuando los llevo al horno. Sirvió de todas maneras la torta, que tuvo un gran éxito entre los degustantes. Pero tuvo una idea mejor que dejarlas en la torta: hacerlas en galletitas.


Un cocinero chino, hace 2 mil años ¿poco más, poco menos- mezcló sin querer carbón, azufre y salitre, por entonces elementos comunes en cualquier cocina. El resultado, fuegos de colores por toda la cocina, hoy conocidos como fuegos artificiales.


Esta historia es tal vez un poco más conocida. Un grupo de científicos estaba tratando de buscar un medicamento para luchar contra enfermedades cardíacas. En una de sus tantas pruebas descubren un efecto secundario bastante llamativo: la pastilla que ingerían los hombres le enviaba fluido de sangre a la zona de la pelvis¿ Hoy conocida como la "pastillita azul", los laboratorios Pfizer inventario el Viagra. No soluciona problemas cardíacos, pero alegra el corazón de muchos.


Un pastor etíope, paseando a sus cabras, se dio cuenta de que sus animales tenían comportamientos raros después de comer unos frutos chicos, de color rojo. Esto llamó su atención y decidió investigarlos. Al ver qué realmente era esto lo que producía su comportamiento, decidió ir un poco más allá y tostó el fruto y lo hirvió en agua. Varias décadas después, en todo el mundo, se toma este brebaje a la hora del desayuno: el café.