DeNunCianDo - Sexo Con Muertos

Viernes 2 de la tarde, suena mi celular y es Andrés, mi amigo con el que no hablaba desde que empezó su trabajo en la Funeraria X hace dos meses y quien al parecer ha llamado toda la tarde, pues tengo 5 llamadas perdidas de él. Le contesto, lo saludo y le pregunto el porqué de su insistencia. Me responde que debe hablar conmigo urgentemente y colgamos, habiéndonos citado en mi casa a las 330. Llegó, lo espero y lo recibo en mi habitación. Me alegra verlo después de tanto tiempo, le pregunto cómo va el trabajo y me dice que de eso precisamente quiere hablar. Le digo que como siempre, soy toda oídos para él. Sonríe y comienza: - “Como sabes estoy trabajando en la funeraria X y aunque los turnos de noche son largos, estoy contento, hace un mes ocurrió algo extraño. Llegó una joven que había decidido morir luego de terminar con su novio y bebió arsénico en grandes cantidades combinados con éxtasis, esto le provocó un paro cardiaco y era mi función de la noche, arreglar su cuerpo para la velación.
Ella, de 25 años de edad, tenía los más hermosos ojos que había visto, curvas perfectas, unos senos exuberantes, una cintura de avispa y más abajo comenzaba el edén de su feminidad. Estaba acabada de depilar como personalmente me gusta encontrar una mujer. Tomé mis elementos de trabajo y me disponía para empezar mi labor.
Sin embargo, decidí tomarme mi tiempo para detallarla, era realmente hermosa, esa musa que había inspirado más de uno de mis pensamientos y había sido dueña de más de una de mis masturbaciones. Continué mirándola y encontrándome solo, decidí, acariciarme frente a ella, iba a dedicarle todo el tiempo del mundo. Estando en eso, pensé en besarla y lo hice. Me subí a la camilla donde reposaba su cuerpo inerte y comencé a besarla, a tocarla, a acariciar cada centímetro de su cuerpo hermoso y delicioso que ante la yema de mis dedos no sentía el frío propio de los muertos…
Me sentí extraño haciéndolo pero no paré, por el contrario seguí con devoción, le hablé y sin pensar en bajarme y terminar, continué haciéndole el amor. Besé cada poro de su piel tersa aún, la acariciaba más con deseo y excitación que con otro sentimiento, me quité la camisa y tomé una de sus manos, hice que me acariciara, bajé mis pantalones y le entregué mi pene… con el roce de sus dedos en mi miembro me excité más, tuve la primera erección de la noche y la más larga en mucho tiempo… terminé de desnudarme y me subí sobre ella, bajé por su torso y al encontrarme con su feminidad, pasé mi lengua pensando que podía darle placer…sabiendo que no lo hacía, seguí.
La besé hasta el cansancio, luego abrí su boca y posé dentro de ella mi pene erecto que ansiaba ser chupado… moví su cabeza incansablemente y me dio el placer que muchas mujeres no me habían dado en mucho tiempo… besé su boca y la penetré fuerte, sin sentir que podía lastimarla, al fin y al cabo estaba muerta, la penetré con intensidad, con fuerza, con ímpetu, con deseo, con excitación… volteé su cuerpo y luego de arquearlo, la cabalgué por detrás.. y la hice mía hasta que el cansancio me venció y mi semen cayó sobre ella…”
Mientras él narraba yo escuchaba atenta. Luego, me dijo, la miré por última vez y preparé su cuerpo para el velorio.
No le pregunté cómo se sintió por que fue más que explícito, le cuestioné sobre cuantas veces más lo había hecho, a lo que me respondió: tantas que perdí la cuenta, pero hoy renuncié, ¿está mal lo que hice?
Es difícil para las personas tratar de entender cómo una situación que se aleja de lo normal, puede ser concebida como tal, para hacerlo, hay que tener conocimiento de lo que es la necrofilia.

Necrofilia, desde la sicología:
La palabra necrofilia es de origen griego y significa atracción por los muertos.

Algunos autores refieren que es la obtención de placer sexual con cadáveres, encontramos que la necrofilia consiste en hallar el máximo placer, por medio de tocamientos y fogosidades con personas ya fallecidas. O sea, la necrofilia es la excitación sexual provocada por la contemplación, el contacto, la mutilación o la evocación mental de un cadáver.

De lo anterior se deriva que la necrofilia es "ocasional" cuando alguien con tendencias necrofilas coincide con un cadáver que le atrae y hace lo que puede con él por las vía natural o anal.

¿Cuando es aberrante o considerada nociva? Es "sádica" cuando primero mata a la víctima para copular post-mortem con el cadáver.

Si la víctima primero es asesinada y posteriormente violada, el acto en sí constituye un sadismo extremo, siendo el objeto sexual un fetiche. Si el cadáver es violado directamente eso implica que la patología es un trastorno profundo de la personalidad y frecuentemente de la percepción del mundo de parte del agresor, en quien es común que se aloje una psicosis o algún otro tipo de trastorno mental grave.
Los sujetos necrofilicos padecen una patología de la identificación de la imagen de la pareja sexual, que a menudo se acompaña de otros trastornos del comportamiento.
Aunque presentan escaso interés en las personas vivas, existen aquellos que pueden llegar a tener relaciones con una si ésta permanece quieta, como si estuviera muerta, aunque esto es sólo una imitación de lo que realmente les proporciona una gratificación erótica.
La necrofilia se ha manejado como una desviación sexual, perversión o parafilia y es en general un impulso compulsivo en el carácter y puede pasar desapercibido por la gente que rodea al individuo que padece este trastorno. De lo anterior se puede deducir que todos tenemos una parte necrofila latente o manifiesta, ya sea como individuos o como sociedad. Y prueba de ello es que de una u otra manera todas o casi todas las sociedades rinden tributo a la "Santa Muerte". O como es el caso de la sociedad mexicana que destina un día al año para adorar a nuestros muertos. (Día de Muertos).

Cabe mencionar que según estadísticas, en el siglo pasado la humanidad gozó, solamente un mes de paz, tiempo en que no se presentaron conflictos armados a nivel a nivel sociedad. No así a nivel individual, que nunca a dejado de existir la agresión, evento en el cual desgraciadamente hay perdida de vidas humanas, muchas de ellas con fines necrófilos.

En definitiva, el placer sexual, sea cual sea su forma de búsqueda, de elemento para llegar al clímax, un zapato de tacón, un anciano o un muerto, no debe ser visto como aberrante si no causa daño a los demás y no se convierte en un hábito que impide que las relaciones sexuales se manifiesten como lo que la sociedad ha denominado: normal. Mientras no impida que Andrés logre hacer el amor con Juliana, su novia, y lo disfrute igual, no es un problema…