Durante 50 años, James Klokow había creído lo que su madre le dijo, que él fue el responsable de la muerte de su hermana bebé.

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Desde que tenía 3 años, Klokow dijo, que su madre le había dicho que por cuidar de él, se distrajo de su hermana de 7 meses Jeaneen. Y se cayó de un sofá, rompiéndose el cráneo y muriendo al instante.

Ahora, una historia diferente ha surgido y su madre, Ruby Klokow de 74 años, está sentado en una cárcel de Wisconsin, en espera de juicio por presuntamente matar a su hija en 1957.

“James Klokow siempre pensó que era el responsable de la muerte de Jeaneen. Después de ver un programa de televisión sobre casos de asesinatos en el 2008, James Klokow fue a la policía y les pidió que reabrieran la investigación sobre la muerte de su hermana”.

“Esto no fue una investigación fácil”, dijo DeCecco el fiscal a cargo de la investigaciòn. ”Fue muy complicado. Era 1957, por el amor de Dios. Todos los registros no estaban, la mayoría de los testigos se habían marchado. Uno de los detectives originales todavía estaba vivo, pero no podía recordar el caso”.

“Si no fuera por algo que James Klokow, creyó que había ocurrido, no tendríamos un caso”, dijo el fiscal.

La investigación llevó mas de dos años, la exhumación de los restos de Jeaneen, y una supuesta confesiòn de Ruby Klokow.

Un médico de la familia que hizo la autopsia inicial de Jeaneen, llegó a la conclusión que el 1 de marzo de 1957, la muerte fue accidental. Encontró como acciones irresponsables de Ruby Klokow, pero no una intención penal.

Dos médicos exhumaron y examinaron el cuerpo el año pasado. Su informe llegó a la conclusión de que el bebé murió de “heridas en la cabeza en forma abusiva”, que dio lugar a una hemorragia cerebral. Los médicos forenses encontraron lesiones de casi 30 centímetros, que no eran compatibles con una caída desde un sofá, sobre una alfombra que cubría el piso de madera, como se informó originalmente.

Con la creciente evidencia, la policía fue a enfrentarse a Ruby Klokow. Los detectives entrevistaron a la mujer en su casa de Sheboygan el mes pasado.

“Ruby inicialmente declaró que no había hecho nada para herir Jeaneen, y que Jeaneen debió caerse del sofá, mientras estaba arriba con James”, dice la denuncia penal.

Pero, después de ser interrogada, dijo Ruby que Jeaneen no cayó del sofá y que ella pudo haber sido” un poco dura con Jeaneen”.

Ella dijo a los investigadores que los niños estaban en dos habitaciones, Ruby en un coche en la sala de estar y James en el piso de arriba en el baño. Los niños estaban llorando al mismo tiempo y “se sentía frustrada en gran medida por oir los niños gritando y llorando al mismo tiempo”, según la denuncia.

“Ruby dijo que ella tomó a Jeaneen de la silla y pudo haberla dejado caer al suelo de madera”.

Otro de los niños de Ruby Klokow, un hijo, también murió en la infancia. La policía ha exhumando el cuerpo de ese niño también.Pero ella ha negado matar al muchacho.