Agentes de la policía de Colorado, en Estados Unidos, utilizaron una pistola de descarga eléctrica para someter a un niño de diez años que estaba "fuera de control" y después lo arrestaron. El capitán Jeff Teschner, de la Oficina del Alguacil de Pueblo, dijo que el niño no sufrió lesiones cuando los asistentes del alguacil le aplicaron la descarga eléctrica. Los agentes fueron a la casa de una familia que tiene la custodia temporal del niño, luego de que lo acusaron de destruir los muebles.

Teschner justificó que los oficiales necesitaron usar el arma para controlar al niño. Los guardias acusaron al menor de haberlos amenazado con un tubo y con una vara y dijeron que les arrojó un pedazo de madera.

El niño fue arrestado y acusado de amenaza con un arma mortal.

El mes pasado, un policía de un pequeño pueblo de Arkansas fue despedido por haber usado el mismo tipo de arma para controlar a una niña rebelde de diez años.

Sin embargo, el despido no fue por usarla sino por transgredir las normas del departamento al no haber usado una cámara que está adherida al arma.