El 10 de Septiembre de 1990, a las 9:30 de la mañana en la ciudad de Alfena, un grupo de niños se encuentran jugando frente al Café Ferreira.
De repente, el grupo y las personas que por allí pasaban son sorprendidos por un objeto metálico con forma esférica y con 5 "patas" que pasa por encima de una cancha de fútbol en construcción allí cerca, a veces se desplazaba haciendo movimientos rápidos, a veces moviéndose lentamente, llegando a estar a una altura de mas o menos 3 pisos.El pánico comienza a esparcirse.
Viendo que el objeto se prepara para aterrizar al pie del campo de fútbol, los trabajadores que estaban en la construcción del campo comienzan a tirar piedras en dirección al objeto, que reacciona quedándose estático en el aire durante unos momentos. Los testigos quedan horrorizados, las madres gritan para los hijos no se aproximen, otras no consiguen contener la curiosidad.
Los niños que estaban frente al café van a llamar Manuel Moura, quien era fotógrafo, quien va a su casa y saca su cámara fotográfica. Ya con cámara en mano, cuando llega al lugar el objeto ya está suspendido en el aire mientras los trabajadores siguen tirandole piedras, lo que dio tiempo a que el fotógrafo tomara 4 fotos del objeto. Enseguida el objeto se aleja la gran velocidad, desapareciendo en el horizonte...
Esa noche, el temor aún está presente en la población de Alfena, que no consiguen dormir con calma pensando que aquel objeto volvería, pero esto no paso. Las fotografías de Manuel Moura fueron enviadas a la CNIFO (Comisión Nacional de Investigación del Fenómeno OVNI) para luego enviarlas a especialistas en el INETI (Instituto Nacional de Ingeniería y Tecnología Industrial).
Tras un análisis fotográfico, los investigadores admiten no encontrar indicios de fraude, no siendo posible la identificación del objeto.
De seguida son enviadas a Richard Haines, psicólogo consultor de la NASA quien tampoco obtiene resultados que concluyan exactamente la naturaleza del objeto. Una investigación exhaustiva fue efectuada con la cooperación de la CIA, Pentágono, NORAD, Centro Nacional de Estudios de Toulose y Agencia Espacial Europea, sin resultados concluyentes y definitivos. Sólo Pierre Guérin, del Instituto de Astrofísica, propuso la hipótesis de que el objeto se tratara de un RPV (Remoted Piloted Vehicle, una especie de dron).
Las fotografías tomadas esa mañana, aún hoy son consideradas a nivel científico como unas de las más importantes fotografías del fenómeno OVNI a nivel mundial ya que no se les ha demostrado manipulación o trucaje alguno.