¿Cometerá Santos el mismo error de Pastrana, permitiendo que en la mesa de la paz se siente todo el mundo, cada quien a imponer sus propias ideas, convirtiendo los diálogos en interminables? Lo hizo bien al adelantar la fase exploratoria entre los enviados del gobierno y las farc, sin patos.

Ojalá en esta segunda fase, con el comienzo de los diálogos, no abra la puerta para que todo el mundo opine, proponga y alargue hasta términos inconcebibles lo que debe ser un diálogo fluido con una agenda clara, corta y realizable.

Ahora son los militares en retiro los que quieren sentarse a dialogar y no un representante de ellos, sino tres, uno por cada arma y desde ya exigen temas que no se han discutido en la fase exploratoria y que por lo tanto no están en la agenda, como el cese al fuego unilateral de las Farc y acciones penales.

Es obvio que l cese al fuego debe ser bilateral, es decir las partes dejarán de agredirse y es obvio que debe haber desmovilización y de igual forma tendrán que haber consecuencias penales para algunos crímenes por mandato de la legislación internacional..

Pero este gremio, algunos de cuyos miembros piensan que Santos es un aliado de la subversión y por lo tanto debe ser depuesto, convocando a una Constituyente que ponga de nuevo a Uribe en el poder, puede ser un palo en la rueda del proceso de paz.

El presidente Santos representa al Estado y es el presidente de los colombianos y como tal los representa en la mesa de negociaciones a través de sus enviados. Ahí debe parar la cosa, pero si se permite que la sociedad civil, que los desplazados, que las víctimas, que los militares en retiro, que el congreso, que los partidos, que los gremios, etc, etc, etc, participen, termina volviéndose un esperpento como el Caguán.

De todas formas ya el gremio de los militares retirados está pidiendo pista.

Militares anuncian al general (r.) Mora como su vocero



Jaime Ruiz, presidente de la Asociación Colombiana de Oficiales en Retiro (ACORE), dijo este martes que pidieron al presidente Juan Manuel Santos que el general (r) Jorge Enrique Mora y otros dos voceros militares acompañen los diálogos.

"Esto es un trabajo en equipo y por ello lo elegimos. Como una sola institución que somos, canalizamos todo en el general Mora", dijo Ruiz en diálogo con La FM radio.

El presidente de ACORE precisó que las Fuerzas Militares harían parte del equipo negociador con tres representantes, uno por cada fuerza, y agregó que este miércoles se realizará una reunión para determinar los otros voceros aparte de Mora.

Ruiz también planteó que "mínimo tres condiciones se deberían exigir": desmovilización y entrega de armas, acabar con el narcotráfico y que haya una acción penal.

Sobre el cese al fuego, el vocero de los militares retirados aseveró que su propuesta es que sea unilateral.

"Se silencian los terroristas, pero el Estado mantiene la soberanía del poder de las armas para poder ejercer el control territorial donde sea", dijo Ruiz, quien agregó que "también existe el ELN y las bandas criminales", razón por la que consideran que no se puede acordar un cese al fuego que incluya a la fuerza pública.

Este lunes, ACORE dio a conocer una carta de diez puntos sobre los acercamientos para un proceso de paz entre el gobierno nacional y las FARC. En la misiva, los militares en retiro manifiestan su intención de respaldar el proceso "dentro de las circunstancias planteadas".

Fuente: Semana