Más de 40 miembros de Al Qaeda se infiltraron en el territorio de Yemen desde el extranjero a través de la ciudad porteña de Aden con el fin de emprender una serie de ataques contra cárceles donde están recluidos miembros de esta organización terrorista, según comunica el Ministerio de Defensa. En el país decretaron el estado de alerta máxima. El grupo ya asaltó una de las prisiones donde permanecen presos varios miembros de Al Qaeda arrestados a inicios de esta semana, pero fracasó, según filtran medios estadounidenses. Los terroristas llevaban armas pesadas, entre ellas granadas propulsadas por cohetes. Las tomas de prisiones y las fugas son una situación casi habitual en el Yemen de hoy. Así, la semana pasada 24 efectivos de Al Qaeda, con presunta ayuda de unos cómplices desde afuera, lograron huir de una cárcel de seguridad máxima en la provincia suroccidental de Al-Hodieda. Aprovechándose de los disturbios violentos en el país, que finalmente se saldaron con la renuncia del presidente Ali Abdullah Saleh, Al Qaeda logró el año pasado tomar control sobre varias ciudades yemeníes. El nuevo mandatario del país, Abdu Rabu Mansour Hadi, una vez en el poder intensificó la lucha contra la red terrorista. Las fuerzas de seguridad yemeníes han detenido en los últimos cinco meses a 53 supuestos miembros de Al Qaeda, entre ellos a los sospechosos de planear asaltos contra altos cargos políticos y policiales del estado.