Gracias por los datos históricos. En cada país hay monumentales, como el inicio en Colombia de los "diálogos del Caguán". El presidente acudió a la cita a firmar y "Titofijo" lo dejó metido, permaneciendo vacía la silla que iba a ocupar, vacía. El semblante adusto de Pastrana lo decía todo. Se siguió la "caña", pero fue una metida de pata histórica de la que aún estamos pagando las consecuencias.

Y la otra reciente, recién salida del horno, como lo recuerda "Neo", fue la del Ministro Esguerra al haber firmado la reforma a la justicia, que horas más tarde su jefe descalificaría. No leyó las enmiendas absurdas agregadas por la Comisión de Conciliación, como tampoco lo hizo el Presidente de la Cámara, Simón Gaviria. Metida de pata monumental que tiene en este momento sumido al país en una honda crisis institucional.

Y una metida de pata guerrillera se la podemos achacar al M-19 cuando decidió tomarse la Palacio de Justicia dizque para enjuiciar al Presidente de la República. No contaba con la feroz arremetida de las fuerzas militares que no solo acabó con el intento en menos de 48 horas, propinándole una derrota de la que no pudieron recuperarse, sino que dio ocasión a una época tenebrosa de violación de derechos humanos.

Y si alguien en nuestro país es sinónimo de metidas de pata, es Antanas Mockus. En su campaña presidencial la metió tantas veces que en pocas semanas diluyó un triunfo seguro en las urnas. Una de ellas fue la los salarios a los médicos cuando estuvo de acuerdo en que un millón de pesos era lo justo, o haber declarado su admiración por Chávez, entre muchas otras.