El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, se quitó el costoso reloj que le regaló su esposa, Carla Bruni, mientras saludaba a sus simpatizantes reunidos en la plaza de La Concorde, en París.
El candidato a reelección cantó La Marsellesa y luego bajó de una tarima para recibir el tradicional saludo del pueblo.
Según informó ABC de España, el reloj suizo de marca Patek Philippe se le estaba cayendo del brazo y, según el mismo medio, un ladrón estaba camuflado entre la multitud esperando el momento de llevárselo.
Las elecciones se llevarán a cabo el 22 de abril y, de ser necesaria una segunda vuelta, el 6 de mayo. Sarkozy aspira a ser reelegido. Su rival en las urnas será François Hollande.