―Mamaburras?
―Asi mismimito dijo OoOops, mamaburras.
―¿Y eso por qué o qué?
―Por el Teófilo
―No entiendo, qué tiene que ver el Teo en esto
―No vuelva a decirle Teo que OoOops se emberraca
―¿Y entonces cómo hay que decirle?
―-“Petardo”, porque los diminutivos son para el que se le tiene cariño.
―-Pero si yo al Teo le tengo cariño
―Otro que está buscando lo que no se le ha perdido. ¿Qué quiere? ¿Qué también lo llamen mamaburra? Mire que hasta el John Locke le sacó los cueros al sol.
―Jajajaja, esto pinta para culebrón.
―No se ría que es de verdad. Le dijo al OoOops que respetara, que costa es costa y lo demás lagaña de mico.
―Dejá de inventar, ome
―Vos sin no podés ver un pobre acomodao. Que sí ome. Pero eso no es todo, le dijo que si a eso se iban el Tino no era sino pura mondá.
―Ijuepucha, ¿y qué? ¿Se dieron en la jeta?
―No porque el OoOops le sacó el árbol genealógico y parece que una prima de la tía de la hermana de la cuñada del abuelo, es decir, la misma pero al contrario, como que había ido a la Costa y la habían hecho conocer el mar.
―Me imagino como debió quedar, como camarón cocido.
―Y preñado, pero ahí no para la cosa
―No jodás…
―Como ejemplo de Mamaburra puso al Quesorallao.
―Jajajajaja, y entonces, ¿le reviró?…
―Pasó de agache, pero el que si se le emputó fue el Messias.
―Mierda…
―Y media, mijo. De una le arrió la madre y le dijo que tenía nombre de marica.
―¿La madre?
―No, huevón, el hijo.
―Oops
―Y ahí fue cuando metió la cucharada el glorioso ejército de Colombia
―¿El teniente Malagón?
―Ahora sos vos el que andás jodiendo. Individual les dijo que pilas, que si se ponían muy moscas, que los ponía a hacer flexiones, que dejaran de huevonear, que el único que tenía derecho a decir marica, era mi cabo primero, Alvaro Uribe.
―Tocaba, mijo.
―Y ahora que habla de “tocaba” ¿sabe a quién le tocó? Al Gio Moreno. Igualito que al Teo, el OoOops le dijo que también era un mamaburra.
―¿Y ese qué velas tiene en este entierro?
―Pues no ve que se metió de redentor y salió crucificado. Mejor dicho se metió en el medio cuando el Teo estaba peliando en el camerino y le pusieron un ojo colombino.
―Hijueputas racistas, le pusieron negro lo único blanco que tiene.
―Para que vea, pero volviendo al cuento, ¿sabe quién se metió a calmar el avispero?, el Shinji, con regaño y todo, que frescos, que tomaran valeriana, y ahí fue cuando supimos que el OoOops no había sido el del “mamaburras”
―¿Cómo que no fue?
―Eso dice él, que fue una de sus personalidades.
―lol
―Pero eso no es todo.
―¿Falta más?
―Mc entró, leyó dos veces y salió como la Virgen, sin romperse ni mancharse.
―¿Cómo así?
―Pues sí, salió del post, virgen y puro porque él dice que no entendió nada de nada.
―Pues la verdad yo tampoco. Nosotros nos agarramos de las mechas porque Teo se agarra de las greñas. Mejor dicho, abrite pirovo y dejame trabajar.