Las estrellas del porno estadounidense han lanzado una cruzada contra Rick Santorum, el candidato a la presidencia por el partido republicano que, en su afán por atraer a los electores ultraderecha, promete acabar con esta industria caso de ser elegido.

Convencido de que el país "está sufriendo una pandemia de daños de parte de la pornografía", Santorum se ha comprometido a prohibir los videos porno en Internet y a fortalecer los controles en la televisión, los moteles y los sex shops.

El sector no ha tardado en levantarse ante lo que consideran un desafío inaceptable. “Las estrellas porno y los estadounidenses no debemos permitirlo. Una prohibición como esta es una bomba de acción retardada: tarde o temprano desembocará en un aumento de los delitos sexuales”, sostienen las celebridades más destacadas de la industria a través de un video-mensaje colgado en YouTube.

A fin de mostrar su repudio al enemigo de ‘las libertades sexuales’, los actores porno se han solidarizado con los 'hackers' de Anonymous y el movimiento Ocupa Wall Street. Para el 1 de mayo las estrellas del porno mantienen convocada una huelga general en solidaridad con los indignados “en su lucha contra el 1% de los más ricos y poderosos", y además han convocado un acto de sexo público en masa o, más exactamente, de masturbación en masa. Aparte del video también han creado en Twitter el 'hashtag' ≠wankout 2012 (‘masturbar 2012’). Según los organizadores del 'flash mob', el 1 de mayo el mundo contemplará sexo protagonizado por millones de personas. Sea como fuere, tres semanas antes del evento, su video-llamamiento sólo cuenta con 7.875 visitas.

Según 'Adult Video News', hoy en día la industria pornográfica en Estados Unidos -películas, descargas 'on line', juguetes sexuales, centros de baile erótico y otras empresas relacionadas- genera unos 8.000 millones de dólares anuales. Según los gigantes del sector, las promesas de Santorum no son de interés para la población en general. Desde que la pornografía pasó a ser ampliamente accesible a través de Internet en la década de los 90, la violación, el embarazo entre adolescentes y los delitos sexuales han disminuido, afirma Steven Hirsch, director ejecutivo del 'Grupo Vivid Entertainment', uno de los líderes de la comercialización de películas para adultos en EE. UU.