Denunciante Bronce
| Bloques erráticos
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5,00 | Peñascos que viajaron a lomos de los glaciares y se acercan a nuestras casas. El retroceso de los glaciares dejó estos bloques erráticos en lo que hoy es el Central Park de Nueva York. Inspirado en el «infantil aspecto lúdico de la naturaleza», el arquitecto paisajista Frederick Law Olmsted, uno de los diseñadores del parque, intentó mejorar la belleza natural del paraje y colocó estratégicamente algunas de estas rocas para crear escenas poéticas. El bloque errático que hay en primer término cayó rodando por una ladera como parte de la carga del glaciar Mendenhall, en Juneau, Alaska. Con una velocidad de descenso de hasta medio metro al día, el glaciar acabará depositando a sus pasajeros en el lago Mendenhall, donde reposarán hasta que los glaciares se expandan de nuevo. Leaverites («déjalas-donde-están») es otro apodo para los bloques erráticos demasiado grandes para moverlos, como este de un aparcamiento en Mystic, Connecticut. Pero las constructoras no siempre los han respetado. Este bloque errático permanece donde fue depositado por un glaciar. La localidad de Glen Rock, en New Jersey, creció alrededor de él. El bloque de Glen Rock tiene varios nombres: la Roca, la Gran Roca, la Rocaza, entre otros. El pueblo de Glen Rock, en Nueva Jersey, debe su nombre a este bloque errático de 570 toneladas. Los científicos creen que un glaciar lo acarreó desde unos 30 kilómetros más al norte. Los indios lenape, que vivían en esta región, tenían otra teoría. El nombre que usaban para este tipo de rocas era pamachapuka, que significa «piedra caída del cielo». Bloques erráticos yacen al azar en Olmsted Point, en el Parque Nacional Yosemite. Un glaciar esculpió la superficie fracturada de este lecho rocoso, de 92 millones de años, y al fundirse, dejó atrás estas rocas que había arrancado e incorporado al hielo a su paso por una montaña cercana. Las estrías producidas en el lecho rocoso determinan el desplazamiento del flujo glaciar. Bloques erráticos procedentes de una montaña cercana yacen en la explanada de Olmest Point, en el Parque Nacional Yosemite, a 2.560 metros de altura. El glaciar que los transportó se desplazó hasta Tenaya Canyon aumentando su grosor en varios miles de metros. Como caído del cielo, un bloque errático de 40 toneladas se yergue en la Reserva India Colville, en el estado de Washington. Algunos llaman a estas piedras rubbing stones («rocas para rascarse») porque los bisontes se frotaban en ellas. Leaverites («déjalas-donde-están») es otro apodo para las que son demasiado grandes para moverlas, aunque no siempre se haya hecho caso de su nombre. Yeager Rock (a la derecha), en el norte del estado de Washington, ha ayudado a los geólogos a determinar el límite del hielo en su avance hacia el sur. También ha proporcionado a los estudiantes de la zona un lienzo donde pintar fechas señaladas. Brenda Díaz y Jessica Ruiz disfrutan de un descanso durante un viaje por carretera por la zona centro-norte del estado de Washington. En el pasado los indios esculpían estas rocas, pero los artistas actuales, algunos de los cuales han querido inmortalizar el año de su graduación del instituto en el Yeager Rock, prefieren la pintura.
__________________ "Aún hay vagos destellos de civilidad en este matadero salvaje que alguna vez fue la humanidad". |