Sexo en el aire. La compañía aérea Flamengo Air (de Cincinnati), no permite fumar en el avión ni molestar al piloto en la cabina, sin embargo, puso en marcha una oferta única. Por US$425 el pasajero y su pareja pueden disfrutar de una inolvidable noche de sexo aéreo. La tarifa incluye cama con cortinas, champán, chocolates y claro, un piloto discreto.
La carta de Papá Noel. Byron Reese tuvo una gran idea en 2001. Consiguió una dirección postal en el Polo Norte (en Alaska) y se hizo pasar por Papá Noel. Reese envía cartas a todos los niños como si fuera Papá Noel, por un costo de 10 dólares. Desde que creó la compañía, envío cientos de miles de cartas.
La ley del menor esfuerzo. Hay empresas cuyas tareas parecen sin sentido. Picly Domains nació para inventar nombres de dominios de internet para terceros. No es un chiste. Su facturación alcanzó las seis cifras.
La idea del millón. Alex, de 21 años, quería ser millonario. Tomó una página web con 1 millón de píxeles y los vendió a 1 dólar cada uno. Sin un pelo de tonto, Alex aún debe estar disfrutando de su millón de dólares.
Antenas únicas. Esto no es mentira: a un hombre se le ocurrió la idea de vender antenas personalizadas ¡sí, antenas! y no le fue nada mal. Jason Wall ahora es millonario.
Animales a la moda. Los dueños de 'Dogales' se anticiparon a lo que ahora es todo una costumbre: comprar accesorios para mascotas. La gente cada vez trata mejor a sus mascotas y esta gente pudo ver el negocio en el momento justo.
Cuando poco es mucho. Si un amigo te diría que va a fundar una fábrica para vender huesitos de plástico de la suerte, no harías más que reirte. Eso le debió haber pasado a Ken Aarón. Pero su fabricación ya está en las 30 mil unidades diarias y espera tener ventas por más de un millón de dólares. Qué tal.