El australiano deberá pagar una multa de 800 dólares estadounidenses por la ofensa a la reina.
El hecho se presentó durante la visita de su Majestad del pasado mes de octubre, pero el martes al enterarse de la condena advirtió que volvería a hacerlo.
Liam Warriner, de 22 años, camarero en Sydney, ha sido juzgado por perturbar el orden público, durante la visita de Isabel II a Australia en otoño de 2011. Compareció ante el tribunal de Brisbane (oeste) y se declaró culpable.
El tribunal le condenó el martes a una multa de 750 dólares australianos (800 dólares estadounidenses o 609 euros). Cuando el cortejo de la Real atravesaba la ciudad de Brisbane, capital de Queensland, Warriner se bajó los pantalones y corrió durante unos 50 metros a la altura de las motos de la escolta, con una bandera australiana en el trasero, según la agencia Australian Associated Press.
Explicó a la policía haber actuado para mostrar su rechazo a la monarca y las elites, dijo durante el juicio. A la salida del juicio, el joven afirmó que volvería a actuar durante las visitas de altos cargos. "A todos los que creen ser importantes o pertenecer a la elite, "¡enseñaré mi trasero con alegría!", lanzó.
FUENTE: EL TIEMPO