Amnistía Internacional (AI) exige al ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, que cancele los planes militares para desplazar forzosamente a alrededor de 2.300 residentes beduinos de Cisjordania y ampliar los asentamientos israelíes de la zona.

Este organismo internacional de Derechos Humanos instó el miércoles a las fuerzas armadas israelíes a interrumpir la demolición de 20 complejos residenciales palestinos, cuyos propietarios se han visto obligados a abandonar la zona, informa la agencia palestina WAFA, citando un comunicado de Amnistía Internacional .

El documento de AI precisa que Ann Harrison, directora interina adjunta del Programa de Amnistía Internacional para el Oriente Medio y Norte de África, pidió a los funcionarios israelíes que cesen de desalojar obligatoriamente a los palestinos de sus viviendas.

"Miles de beduinos que viven en algunas de las comunidades más vulnerables de Cisjordania se enfrentan a la destrucción de sus hogares y sus medios de subsistencia en virtud de este plan militar israelí. Muchos de ellos están registrados como refugiados, y algunos han sido desplazados varias veces desde 1948", comunica el informe, citando a Harrison.

El régimen de Tel Aviv, no obstante, ignora abiertamente las críticas de la comunidad internacional y continúa erigiendo colonias en los territorios ocupados para alterar la composición demográfica de las regiones palestinas; evidentemente, a favor de los israelíes.