Cambiar el rumbo de Bogotá. Esa es la propuesta fundamental del ex candidato presidencial Gustavo Petro, quien acaba de lanzarse como candidato a la Alcaldía de la capital. Economista del externado, Petro se lanza por un nuevo movimiento, Progresistas, ante su retiro del Polo Democrático.
¿Usted sí cree que tiene opción de ser elegido alcalde de Bogotá?
Si no lo creyera, no me habría lanzado. Un político entra a una campaña a ganar, sabiendo del riesgo; que nada está escrito, que todo cambia.
¿Qué debe esperar Bogotá de usted?
Un cambio de rumbo inmediato. Una Bogotá humana, ya. Hoy el rumbo es la depredación, la segregación. Al extenderse, la ciudad se vuelve más costosa y al hacerla así segrega, arrincona y margina a los pobres y permite que la ciudad gravite alrededor de los que más tienen. Acaba el agua y la tierra.
¿Propone "cambiar el rumbo" para buscar qué?
Para incluir a las gentes excluidas. Bogotá tendrá futuro por esta vía, no por el camino de la segregación. Llegó un alcalde a decir que era bueno exportar los pobres al otro lado del río, donde no hay capacidad de subsidios, y mantener a los más pudientes dentro de la ciudad para que le paguen impuestos a Bogotá. Ese modelo no se puede sostener, es el que yo llamo depredador. Hay que ponerle corazón a la ciudad. Cambiar la presión en las fronteras y volver al centro. Un centro ampliado que va hasta la 68 con el occidente, a Muzú, a Chapinero. Ese espacio de miles de hectáreas generalmente de barrios de dos casas y un centro alicaído se puede convertir en un gran escenario de oportunidades para la gente, para la economía, para la cultura, para la construcción, para la inclusión diversa de los bogotanos
¿Qué es lo que usted llama segregación?
Poner a un lado a los que tienen, y a otro lado a los que no tienen.
¿Si usted gana, no gana el Polo?
La dirección del Polo no quiere que gane, porque represento una visión diferente a la que tienen de la política y la sociedad. La del Polo es una visión sectaria que no le permitió ver la corrupción porque quien la denunció tenía una visión democrática, pluralista.
¿No la vio o no quiso verla?
Los protagonistas de la corrupción la veían y la ocultaban. Cuando yo la denuncié los sectarios hicieron causa común con los corruptos.