El sargento Arbey Delgado (
foto), ex rehén liberado en junio de 2010, relata en su libro
Lo que en la selva quedó cómo la insurgencia colombiana se deshace de los enfermos.
"«El Mono Jojoy» los fusilaba", escribió 
Crédito foto: Reuters
"Serían las cuatro de la tarde cuando vi a un guerrillero, llamado Toño, llorando desconsoladamente
. Me acerqué a preguntarle qué pasaba y me dijo que tenía muchos problemas de salud, en especial una enfermedad que lo estaba matando y que por eso tomaba mucho, los médicos le habían dicho que le quedaría un año más de vida. Al escuchar sus palabras me di cuenta de que era una gran oportunidad para invitarlo a escapar o convencerlo para una futura desmovilización", narra Delgado en el texto que saldrá a la venta el próximo 15 de mayo y que
El Espectador adelantó en su edición.
Delgado tenía 29 años cuando fue secuestrado por las FARC el 3 de agosto de 1998, durante el asalto a la base de Miraflores en Guaviare. Permaneció cautivo 11 años, 10 meses y 12 días hasta que
el por entonces gobierno de Álvaro Uribe los rescató en la autodenominada Operación Camaleón.
En ese operativo militar realizado en junio de 2010, fueron rescatados cuatro secuestrados. Además de Delgado, recuperaron la libertad el general Luis Herlindio Mendieta, y los coroneles Enrique Murillo y William Donato Gómez.
Ahora, a casi un año de su regreso a casa, Delgado presenta
Lo que en la selva quedó, un relato detallado de sus años de cautiverio. Sin embargo, en uno de los capítulos devela una información hasta el momento desconocida: el contagio de sida en las filas de las FARC.
"Estaba de guardia "Cucaracho" y aprovechamos que el otro guardia estaba cansado para conversar; le pregunté si tenía compañera y me dijo que sí, que era muy bonita, pero debía cuidarse mucho con las mujeres.
Gentil, el comandante del Séptimo, les dijo en una charla que habían fusilado a un guerrillero que tenía sida y que, al parecer, había contagiado a muchos del frente", escribe Delgado.
Según detalló el guerrillero, "eso también había pasado en otros frentes del Bloque Oriental, y el
«Mono Jojoy» (ex jefe de las FARC abatido en septiembre de 2010) había dado la orden de fusilar a todos los enfermos. Después, en la zona de distensión, había ordenado un examen general, a "Cucaracho" le había salido negativo".
El ex rehén asegura que ese mismo guerrillero también le contó que los
raspachines (campesinos), que habían reclutado últimamente, también habían traído el sida "y que se estaba propagando rápidamente por todo el Bloque".
Delgado recuerda, además, haber visto a un enfermero de la zona de distensión cansado, quejándose porque había tenido que sacar más de mil muestras de sangre.
"La epidemia podía ser seria", afirma en su libro.
Esas fueron unas de las primeras palabras que dijo el sargento Arbey Delgado Argote, en el aeropuerto militar de Catam, luego de ser liberado por el Ejército en la Operación Camaleón, el 14 de junio de 2010.