Los profesionales de la Universidad de Antioquia consiguieron este logro al aislar el organismo.

Por primera vez en Colombia y en el área andina, un grupo de científicos logró secuenciar u ordenar el genoma de una bacteria. El logro se hizo desde Medellín.

Hasta ahora, en el país simplemente se tomaban las muestras, pero había que enviarlas a Europa o a Estados Unidos para su análisis. Este primer paso lo dio el Centro Nacional de Secuenciación Genómica
(Cnsg), que funciona en la Sede de Investigaciones de la Universidad de Antioquia (SIU).

Para lograrlo, este Centro tiene la tecnología de punta única en el país, que además le permitirá analizar la información, en el transcurso de un año. Según explica el director del Cnsg, Juan Fernando Alzate, el trabajo de secuenciación consistió en aislar dos bacterias de tuberculosis: una extraída a un paciente infectado y otra hallada en condiciones naturales en el Parque de los Nevados.

En ambos casos se tomó el material genético y lo pusieron en una secuencia que permitiera 'leerlo'.

"Así como en un sistema informativo hay archivos, yo tengo que empezar a decir dónde están los archivos y cuál es el '.exe' y cuál el '.doc'", explica Alzate, en un esfuerzo por hacer entender.

Posteriormente, la idea es ver si en presencia de una determinada proteína las bacterias de esta enfermedad tienen mayor poder para causar daño al cuerpo humano o si en presencia de una determinada proteína se puede neutralizar.

La aplicación no sólo será para elaborar vacunas en el campo de la medicina, sino que se podría obtener el mapa genético de plantas, como el café o el aguacate y ver cómo eliminar las plagas que las atacan, y desarrollar especies con mejor rendimiento.

"Uno sabe que hay plantas más resistentes contra los patógenos que otras, entonces se trata de comparar los genes que puedan explicar esto", añade Alzate. Por eso es enfático en señalar que así se logra mayor autonomía para explotar la biodiversidad del país.

El Cnsg funciona desde hace un año y costó más de dos millones de dólares, aportados por Colciencias, laboratorios Roche y la Universidad de Antioquia. Alzate tiene 36 años y es doctor en bioquímica y biología molecular de la Universidad de Alcalá (España).