Denunciante Ultra
 |  Armas, drogas y vacunas, la lucha por el occidente
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 | Armas, drogas y vacunas, la lucha por el occidente  Lo primero que hizo el "Niche" después del largo viaje fue agarrarse la espalda y estirar su cuello adolorido. El trayecto programado para 9 horas se extendió a 16 por los derrumbes en la carretera. Él, que venía de Urabá, se quejó por no haber podido viajar en "primera clase".
El "Niche" llegó a Medellín metido en la caleta de un bus intermunicipal. Viajó escondido entre el equipaje y algunos costales que le dejaron la piel impregnada de un olor a lechuga podrida que le duró varios días. Vino así, escondido, porque temía que a la salida de Urabá lo esperaran para matarlo.
Militó en uno de los bloques de las Auc y llegó a Medellín a engrosar las filas de uno de los 59 combos activos que, según la Personería Municipal, hacen presencia en las comunas 5 (Castilla) y 6 (Doce de Octubre) y que se disputan a sangre y fuego el territorio occidental de Medellín.
Cuenta que vino a instalarse en estas laderas porque la guerra es lo único que sabe hacer y porque le ofrecieron plata. "No lo pensé dos veces y agarré pa' la ciudad. Me dijeron que iba a trabajar con unos manes duros y acá estoy, listo pa' las que sea".
"Niche" llegó de Urabá por una de las rutas más apetecidas por las bandas, la vía al Mar. "Varias veces recorrí este camino armado hasta los dientes. Los controles son pocos y cuando uno se los encuentra, les da pal' fresco y lo dejan pasar tranquilito", asegura.
Una ruta de oro
La carretera por la que llegó "Niche" es considerada por algunos expertos como uno de los corredores estratégicos por los que se mueve parte del comercio legal e ilegal que ingresa a la ciudad y atraviesa su franja occidental de norte a sur, recorriendo, entre otros, los barrios Doce de Octubre, Castilla, Robledo, San Javier, Belén, y los corregimientos de Altavista y San Cristóbal.
Luis Fernando Quijano, director de Corpades, explica que por esta franja estratégica "se mueven las armas y la droga como fuente de financiación, además, la trata de personas, la prostitución y hasta los hombres que combaten en las bandas emergentes o que son enviados a trabajar a los grandes cultivos de coca sembrados en otras regiones".
Según Quijano, estos sitios son utilizados como retaguardia por las bandas delincuenciales, y no se ha tenido un verdadero control para frenar el flujo de lo ilegal que llega a los combos que se pelean los territorios en los barrios de la ciudad.
¿Faltan controles?
"Niche" recuerda con sorna las cosas que trajo por la vía que conduce de Urabá a Medellín.
"Viajamos con armas a cambio de droga. Una vez trajimos un fusil en una caja de mangos y nos llevamos pacas de marihuana. Nos encontramos algunos retenes y no pasó nada".
A esa debilidad se refiere el concejal Bernardo Alejandro Guerra cuando pregunta "¿por qué si estamos cerca de un puerto marítimo, que debe ser controlado, y los aeropuertos son cada vez más sofisticados y vigilados, llegan armas a los combos? Aquí el ingreso no es solamente por la carretera al mar, también por la del Magdalena Medio. Hay unas falencias claras y esto es una responsabilidad de la Policía, el Ejército y de los organismos de control".
Quijano, de Corpades, apoya la teoría del concejal y explica que la guerra entre los combos "no sólo se libra dentro de los barrios por las plazas de vicio, el control del territorio, las vacunas y las extorsiones, sino también en las periferias, por donde ingresa el flujo ilegal y donde no se ha tenido un verdadero control. ¿Cuándo se ha mostrado que ha caído un cargamento de armas? Aquí se ha atacado a las bandas pero no se ha tocado su poder económico", comenta.
Pese a la falta de controles que aducen algunos especialistas y el concejal, el subcomandante de la Policía Metropolitana, coronel Alejandro Bustamante, asegura que en lo que va de 2010, se han incautado 2.023 armas de fuego y han sido capturadas por todos los delitos 15.855 personas, de las cuales 14.555 capturas han sido en flagrancia y 2.187 de cabecillas de combos que delinquen en la ciudad.
Bustamante a su vez dice que "en la operatividad se incautaron 10 toneladas de marihuana, 112 kilos de basuco, 121 kilos de base de coca y 815 kilos de cocaína solo en mercado interno. Además, de 173 bienes utilizados para el tráfico y comercialización de estupefacientes, 82 han sido ocupados mediante extinción de dominio, entre los que hay hoteles, locales comerciales y viviendas".
Respecto de las armas, Bustamante revela que en el 2010 se han quitado a los combos 42 fusiles, 419 pistolas, 1.152 revólveres, 243 escopetas, un lanza misil, 14 carabinas y 16 subametralladoras.
Frente a los corredores estratégicos, el oficial apunta que se ha hecho un trabajo importante en la identificación de la ruta del Urabá, y agrega que con la captura de alias "Jimmy" se logró neutralizar esa parte del occidente (Belén), utilizada para la salida de la droga.
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