En el sector de Villa Tabla y en Pescaíto, al norte de Santa Marta, Modesto Valdez Zúñiga, el indigente a quien le prendieron fuego cuando dormía, tiene quizás sus únicos amigos. Aunque está solo en la clínica Mar Caribe con quemaduras en el 70% de su cuerpo, este reciclador sí tiene dolientes.

Un hermano reside en el barrio Cristo Rey, pero también es muy conocido en los sectores mencionados porque allí vive gran parte de la comunidad afrodescendiente de San Pablo (Bolívar), de donde es oriundo.

Nadie sabía lo que le había pasado a Modesto hasta cuando EL HERALDO mostró la foto publicada. “¡Ay Dios mío!, si es Modestico!”, fue la expresión de Edilsa Guerra al verla. La mujer comentó que el domingo por la tarde estuvo en su casa ubicada en la parte alta de Villa Tabla y ella le dijo que dejara de estar caminando tanto de un lado a otro y que se cuidara.

Luego, en Pescaíto, Fanny Julio también lo reconoció y dijo que viajará a San Pablo (Bolívar) para avisarle a sus familiares.

De Modesto se supo que vivía con su madre en Caracas, Venezuela, y que hace un mes aproximadamente llegó a Santa Marta.