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Antiguo 17-08-2010 , 11:49:13   #2
Stan
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Predeterminado Respuesta: Psicopata colombiano: los 7 peores asesinatos en serie

01.
NEPOMUCENO MATALLANA
(1891-1960)
EL DOCTOR MATA MATA
Tuvo una génesis traumática: recién nacido fue rescatado de un río por una joven que hizo las veces de mamá; años después, la mujer enfermó de lepra. Nepomuceno, desde entonces, negó que ella fuera su madre. En su juventud, en el departamento de Boyacá, estuvo involucrado con cuadrillas responsables de varias masacres.
Cerca de los cuarenta años, se reinventó en un viaje a Bogotá: aprendió de memoria códigos civiles y falsificó diplomas para dejar emerger el rostro del abogado. Su modus operandi consistía en enredar a sus clientes en litigios o en involucrarlos en algún negocio; una vez éstos le firmaban documentos de autorización legal, procedía a matarlos y a desaparecer sus cuerpos.
El socio criminal de Matallana confesó haber disparado contra uno de los clientes del "doctor Mata". Las autoridades relacionaron casos anteriores (más de treinta) donde las desapariciones y testamentos heredados a Matallana se repetían. A pesar de las pruebas, sostuvo que era inocente. Murió en prisión por fallo cardiaco.
02.
DANIEL CAMARGO BARBOSA
(1931-1994)
EL SÁDICO DEL CHARQUITO
Llamado en los medios periodísticos "El sádico del Charquito" (vereda de Soacha). Barbosa fingía ser un vendedor ambulante; era su fachada para cazar. Primero fue violador en serie en compañía de su novia; la mujer le ayudaba a conseguir víctimas con el absurdo objetivo de restituirle la virginidad que no había guardado para él.
Fue encarcelado por estos delitos; una vez libre, en 1975, volvió a atacar a una joven, pero esta vez la mató. Fue condenado a 25 años en la entonces prisión de la isla Gorgona. Allí, durante diez años, se dedicó a leer a los clásicos de la literatura. En 1982, en medio de un descuido de las autoridades, escapó en una balsa y milagrosamente llegó a la costa suramericana. Estuvo en Brasil y luego llegó a Ecuador, donde violó y asesinó a unas setenta jóvenes (en promedio menores de 13 años).
En 1986 fue arrestado justo después de matar a una niña de nueve años; fue sentenciado a 16 años de cárcel. Fue asesinado en 1994 por otro recluso. Desde entonces, decirles a los niños colombianos que los monstruos no existen es mentirles.
03.
PEDRO ALONSO LOPEZ
(1949 - )
EL MONSTRUO DE LOS ANDES
Su motivación homicida era reconocer el terror en los ojos de sus víctimas mientras las estrangulaba (más de 300 jóvenes entre los 8 y los 13 años). De niño, este tolimense fue abusado sexualmente; en la adolescencia encontró en el robo una forma de vida. En una de sus entradas a prisión, fue violado por cuatro hombres; pocos días después asesinó a sus atacantes.
Una vez en libertad, en 1978, deambuló por Perú, Bolivia y Ecuador. A finales de la década asesinó a más de 200 niñas. Fue detenido en Perú, estuvo a punto de ser linchado y enterrado vivo, pero un misionero intercedió en su favor. Salió libre y reinició su carrera homicida en Ecuador, donde mató a cerca de cien jóvenes.
En el momento en que intentaba raptar a una niña en una plaza de mercado, fue atrapado por los vendedores y posteriormente arrestado. Después de trece años en prisión, de nuevo la sombra del mal lo protegió y salió libre. Desde 1993 desapareció; se ha convertido en leyenda urbana.
04.
LUIS ALFREDO GARAVITO
(1957 - )
LA BESTIA
En su juventud, Garavito hizo un pacto con el diablo para ser invisible y nunca ser atrapado. Durante cerca de diez años, por desgracia, el pacto funcionó y le permitió deambular para asesinar a más de 190 niños. Ante las cámaras, después de ser capturado en 1999 por agentes de la Fiscalía, lloró frenéticamente. Ese acto cínico demostró la capacidad de engaño de un psicópata.
Por casi todo el territorio nacional (Quindío, Cauca, Meta, Boyacá, Cundinamarca, etc.), usando la fachada de vendedor o de mendigo, se mezclaba entre los pobladores hasta que identificaba a un niño al cual engañar y conducir a su trampa final. Oculto en alguna zona aislada (cañaduzales), amarraba a su víctima y la torturaba antes de matarla. Como acto final mutilaba el cuerpo de sus víctimas.
Ahora dice haberse convertido y ser un devoto religioso; en una entrevista para la televisión quiso usar de nuevo las cámaras para el engaño. Esperemos que la Justicia sea más fuerte que los pactos con Satanás e impida que la Bestia vuelva a la libertad.
05.
MANUEL OCTAVIO BERMUDEZ
(1961 - )
EL HELADERO SINIESTRO
Violó y asesinó a 21 niños entre 9 y 14 años. Varias poblaciones del Valle del Cauca fueron su territorio de muerte. Usando una fachada de vendedor de helados, prometía a los niños pagarles por acompañarlo a cortar caña. Después de amenazarlos con un cuchillo, los amarraba y les inyectaba en las piernas una sustancia para paralizarlos.
Entre 1999 y el 2003, frente al hallazgo de 17 cadáveres, un grupo especializado de la Dijín, el Instituto de Medicina Legal y el CTI se encargó del caso. Una mujer, residente en Pradera, denunció la desaparición de su hijo; un vendedor de helados le informó haberlo visto en compañía de otro colega.
La mujer avisó a las autoridades las cuales desplegaron brigadas y pronto capturaron al sospechoso. En el allanamiento a su vivienda encontraron un reloj propiedad de su última víctima.
Al ser confrontado, Bermúdez confesó con frialdad. En el 2004 fue condenado a 56 años de prisión, pero debido a su confesión la condena se redujo a 26 años y ocho meses.
06.
JOHN JAIRO MORENO TORRES
(1979 - 199
JOHNNY EL LEPROSO
Su apodo se debía a una quemadura en una pierna. Lideraba una banda criminal que a finales de los años noventa dominó la escena criminal de los barrios Fontibón y Kennedy. Disfrutaba matando, con machete, navaja o pistola, a todo el que se interpusiera en su camino o lo traicionara.
Se conoce un caso en donde le disparó a un joven por tan sólo haberle mirado fijamente. Se presume que fue culpable de varios casos de violación. Su ambición era tener el control de todas las bandas criminales y de venta de drogas de la zona. Asesinó a un expendedor de bazuco e incineró su cuerpo, el cual ordenó fuera despedazado.
En 1998 fue capturado y procesado por cuatro homicidios (se cree que fueron cerca de veinte); fue condenado a prisión en la Cárcel Modelo. Después de un motín de fuga fue trasladado a una estación de la Sijín. Una vez la cárcel retorno a la normalidad, fue ingresado de nuevo al penal. Dos horas después fue brutalmente asesinado por un grupo de prisioneros.
07.
CAMPO ELIAS DELGADO
(1934 - 1986)
EL SENOR HYDE
El FBI acuñó el término asesino relámpago, para definir un crimen que contempla varios asesinatos en dos o más lugares sin un gran intervalo de tiempo. Tal fue el caso de este veterano de Vietnam, obseso del libro El extraño caso del doctor Jekyll y Mr. Hyde, que afectado por el suicidio de su padre, y educado por una madre impositiva, alimentó desde muy joven una siniestra personalidad.
De acuerdo con el criminalista Edwin Olaya, en la noche del 3 de diciembre de 1986 Delgado apuñaló a su madre. Al día siguiente, armado con un revólver calibre 32 y un cuchillo, visitó a una joven (alumna suya de inglés) y la asesinó junto con su madre. Regresó a su apartamento en Chapinero y prendió fuego al cadáver de su progenitora. Mientras abandonaba el edificio, golpeó a la puerta de algunos vecinos y disparó a seis personas más.
En la noche, ingresó en el restaurante Pozzetto. Allí amenazó a los comensales y los obligó a acostarse en el suelo. Luego procedió a dispararles; asesinó a 19 personas. Según el testimonio de una sobreviviente, dos valientes hombres intentaron desarmarlo pero murieron en el intento. La policía intervino y hubo una confrontación final.
No hay consenso sobre si Campo Elías murió por disparos de las autoridades o se suicidó. Lo único cierto es la estela de dolor dejada por su cruzada homicida, que fue una absurda forma de destruir a quien más odiaba: él mismo.
Por: Miguel Mendoza Luna
revista don juan

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La musica de tu año de nacimiento
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