Definición
La
pena de muerte,
pena capital o
ejecución consiste en provocar la
muerte de un condenado por parte del
Estado, como
castigo por un
delito establecido en la
legislación; los
delitos a los cuales se aplica esta sanción penal suelen denominarse «crímenes» o «delitos capitales». Tomado de wikipedia.
Antecedentes
La ejecución de criminales y disidentes políticos ha sido empleada por casi todas las
sociedades en un momento u otro de su
historia, tanto para castigar el crimen como para suprimir la
disensión política. Actualmente el uso de la pena de muerte ha sido abolido en casi todos los países
europeos (excepto
Bielorrusia), y la mayoría de los correspondientes a
Oceanía (como
Australia,
Nueva Zelanda y
Timor Oriental).La mayoría de países
latinoamericanos han abolido completamente la pena de muerte, mientras que los
Estados Unidos de América,
Guatemala y la mayoría de los estados del
Caribe la mantienen en vigor, y en
Chile,
Brasil la contemplan como castigo en situaciones excepcionales, como por ejemplo para castigar la
traición cometida en tiempo de
guerra. En
Asia la pena de muerte está permitida en
democracias como
Japón e
India. En
África, se aplica aún la pena de muerte en democracias como
Botswana y
Zambia.
En muchos países donde aún se aplica la pena de muerte, se la reserva como castigo para crímenes de
asesinato,
espionaje,
traición, o como parte del
Derecho militar. En algunos países se aplica también para castigar delitos sexuales, siendo considerados como tales el
adulterio o la
sodomía. También se castiga con pena de muerte en otros países la
apostasía, la renuncia formal a la propia religión. En muchas naciones
«retencionistas» (es decir, países que aún aplican la pena de muerte), el
narcotráfico es también susceptible de ser castigado con la pena de muerte. En
China, el
tráfico de personas y los casos graves de
corrupción política son castigados con la pena de muerte. En algunos países la pena de muerte se utiliza por motivos políticos, con la máxima difusión posible, como «escarmiento» de masas: en 2007 en
Corea del Norte el director de una empresa fue ejecutado públicamente en un estadio deportivo, ante 150.000 personas
[1] como castigo por haber realizado llamadas telefónicas al extranjero.
En las
fuerzas armadas de todo el mundo, las
cortes marciales y
consejos de guerra han aplicado la pena capital en delitos de
cobardía,
deserción,
insubordinación y
motín.
[2]
El tema de la pena de muerte es muy controvertido. Los partidarios de la misma argumentan que su aplicación reduce el delito, previene su repetición y es una forma de castigo adecuada para el
asesinato. Los detractores argumentan que no reduce el crimen en mayor medida que la
cadena perpetua; que resulta una violación de los
derechos humanos, conduce a ejecuciones de algunos inocentes y supone una
discriminación de hecho contra las minorías y los pobres que puedan no tener recursos suficientes en el sistema legal.
Según el informe anual de ejecuciones judiciales de
Amnistía Internacional, en el año 2003 fueron ejecutadas al menos 1.146 personas en 28 países. El 84% de las muertes documentadas ocurrieron en cuatro países: la
República Popular China llevó a cabo 726 ejecuciones,
Irán mató a 108 personas,
Estados Unidos a 65 y
Vietnam a 64. La última nación en abolir la pena de muerte para todos los crímenes ha sido
Albania, a principios del
2007.
Posiciones doctrinarias sobre la pena de muerte
A lo largo de la historia la vida humana no ha sido considerada con toda la importancia que debiera y en todas las civilizaciones antiguas dominantes, el castigo con la muerte ha sido ampliamente empleado a veces en delitos como el adulterio, que hoy en día leemos en las revistas con la mayor naturalidad.
Durante siglos la defensa de la pena de muerte se basó en los textos de la Sagrada Escritura.
-Antiguo Testamento: Tras el diluvio, Dios habría sancionado el derramamiento de sangre con una acción semejante. Este pasaje servía de legitimación a la pena de muerte junto al principio o ley del talión que también era nombrado con tal fin.
-Nuevo Testamento: Se citaba con frecuencia Mt 5,21 donde Jesús parece comentar el “no matarás” en términos de justificación de la pena impuesta por la autoridad. Los abolicionistas citaban Mt 13,30 que invita a permitir a la cizaña crecer junto al trigo.
Ciertamente la doctrina católica reconoce al Estado el derecho a quitar la vida a una persona culpable de un crimen extremadamente grave y que puede tomar las medidas necesarias para protegerse a sí mismo así como a sus ciudadanos contra un grave peligro.
¿Estás de acuerdo? ... si así es .... ¿en que casos?