Tampoco creo que santistas y mockusianos se odien tanto -es más, ni siquiera hay odio, salvo algún que otro desadaptado - como realistas y republicanos, al punto de hablar de la "guerra a muerte" como enarboló en su momento Bolívar o usar "tropas calavera" como los españoles; o como lo fueron en su momento conservadores y liberales a finales del Siglo XIX y comienzos del XX.

Obvio hay disputas, debates, a veces subidos de tono, pero nunca se ha hablado de peleas o atentados de partidarios de uno u otro candidato. Lo mismo pasó en EE.UU entre electores de Obama y de McCain. Ni siquiera los españoles, que tienen una historia de odios políticos bien particular y marcada se matan por estos días.

Es un tanto exagerado comparar los debates entre electores de Mockus o Santos con la historia política de siglos pasados en Colombia o con la guerra independista.

PD: ¿Y a qué viene Perú en todo esto?