Abril 21 de 2010 | 09:04 AM. | Noticias
Por: Hernando López
El fiscal Misael Rodríguez al hacer los cargos, el viernes 9 de abril pasado a cinco altos ex funcionarios del DAS, ante una juez de garantías, para legalizar sus capturas, reveló en la audiencia pública que el testigo Carlos Arzayús declaró que las “chuzadas” telefónicas y seguimientos a magistrados de la Corte Suprema de Justicia, periodistas y dirigentes políticos de oposición, fueron ordenadas desde la Casa de Nariño.

Rodríguez aseguró que tiene pruebas de que María del Pilar Hurtado, ex directora del DAS, y los integrantes de la unidad de inteligencia, Fernando Tabares y Jorge Lagos, quienes agenciaron la creación del G-3, se reunieron en varias ocasiones con César Mauricio Velásquez, Jorge Mario Eastman, José Obdulio Gaviria y Bernardo Moreno, altos funcionarios de la Presidencia, entre otros, para recibir orientaciones e instrucciones al respecto.

En el caso de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia no sólo fueron investigados de forma ilegal, sino que se interceptaron reuniones privadas de ellos. “Es escandaloso”, declaró el magistrado Valencia Copete, quien enfrenta una querella judicial con el presidente Álvaro Uribe Vélez. Entre los blancos predilectos del grupo delincuencial del DAS, estaban los senadores Piedad Córdoba y Gustavo Petro, ahora candidato presidencial del Polo Democrático Alternativo.

El llamado G-3, ligado a la inteligencia del DAS y cuya existencia, está demostrado, era del conocimiento de la dirección del organismo y de la Casa de Nariño, porque surtió de información ilegal a la Presidencia de la República, promovió anónimos y actos de desprestigio contra los personajes que eran víctimas de sus seguimientos e interceptaciones.

El fiscal dijo que en este caso se evidencia la existencia de una “empresa criminal” por lo cual señala a los altos funcionarios del DAS de los delitos de concierto para delinquir, prevaricato por acción y abuso de autoridad agravado por afectar a funcionarios públicos como los magistrados y los congresistas. De esta manera, se complica la situación de los funcionarios capturados y de la ex directora María del Pilar Hurtado. Pero además, queda en evidencia que fue la Casa de Nariño la que promovió esta acción criminal. Bajo sospecha están los altos funcionarios que se reunían con los directivos del DAS y deben ser sometidos a rigurosa investigación, de la cual no puede escapar el ciudadano Álvaro Uribe Vélez, en la actualidad Presidente de la República, sostienen destacados juristas que han opinado sobre el tema.

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Pues como que le vá a tocar irse pa la carcel entonces, o reencauchar lo de "todo fue a mis espaldas"