Ante masiva asistencia a Juegos Suramericanos, coliseos de Medellín se quedaron cortos
Largas filas fueron la constante toda esta semana de Juegos Suramericanos, en jornadas que comenzaban desde las 9:00 a.m. y se extendían hasta las 8:00 p.m.
Según un cálculo oficial, más de 200 mil personas han visto las distintas competencias.
El coliseo Yesid Santos, para competencias de voleibol, y el Iván de Bedout, sede del baloncesto, están entre los escenarios más visitados.
"La asistencia del público ha desbordado cualquier cálculo y expectativa que se tenía", dijo Jorge Rada, coordinador logístico del coliseo Yesid Santos.
Allí, solo en tres días, han hecho fila cerca de 24 mil personas, de las cuales solo ingresaron unas 9 mil. Y en el Iván de Bedout, 30 mil personas han buscado ingresar y solo 18 mil lo lograron. La capacidad máxima del Yesid Santos es de 1.800 espectadores, 300 reservados para atletas y delegaciones.
En el caso del Iván de Bedout, su aforo es de 6.000 personas, con 500 sillas reservadas.
La estrategia usada desde el inicio de las competencias fue asignar a cada una de las personas una boleta al ingreso del escenario, con la cual tenía la posibilidad de permanecer durante la tarde. La medida beneficiaba a las primeras personas que estaban en la fila y llenaban el escenario deportivo durante toda la jornada.
"Estoy haciendo fila desde las nueve de la mañana y tengo derecho a permanecer durante toda la tarde en el coliseo", afirmó Crístian Giraldo, seguidor del baloncesto, mientras afuera permanecían en fila cientos esperando que un espectador dejara el escenario para habilitar el ingreso.
"Este problema está acabando con la buena imagen de los Juegos", señaló Aidé Molina, quién buscaba entrar al Yesid Santos.
Como a ella a muchos les tocará conformarse con ver las competencias por pantallas gigantes alrededor de los coliseos o a través de las rejas.