A sus 16 años una niña turca fue enterrada viva en un gallinero por los familiares, porque hablaba con los niños.
El cuerpo de Medine Memi fue encontrado en una posición sentada con las manos atadas en un agujero excavado a 6 pies en el patio de la casa de su familia en Kahta, el sudeste de Turquía, 40 días después de haber sido reportada como desaparecida. El agujero se había cimentado.
En la adolescente se encontró una gran cantidad de tierra en sus pulmones y el estómago – que muestra que sufrió una muerte lenta y dolorosa.
“El resultado de la autopsia hiela la sangre. Según nuestras averiguaciones, la chica – que no tenía moretones en su cuerpo y ningún signo de estupefacientes o el veneno en la sangre – estaba viva y consciente, cuando estaba enterrada “, dijo un experto forense.
Un hombre, que se cree ser el padre de Medine, es llevado a cabo de una estación de policía por los agentes en Adiyaman, en el sur-este de Turquía
Este es el agujero, en virtud de un gallinero, en la que Medine fue enterrada viva por sus familiares. Se encuentra ubicado en el patio junto a la casa de la familia
El padre y abuelo de Meme Medine han sido detenidos y encarcelados en espera de juicio. La madre de la niña fue arrestada, pero después fue liberada. Se ha comprobado que la niña había presentado una denuncia a la policía sobre e su abuelo, dos meses antes de su desaparición, diciendo que él la golpeó porque ella habló con los niños.
Además de su padre Ayhan se dice que los parientes no estaban contentos que su hija tenga amigos.La policía hizo el macabro descubrimiento en diciembre tras un chivatazo de un informante.
El caso ha causado indignación en Turquía y reabrió el debate sobre los llamados crímenes de honor, que son especialmente en la mayoría kurda del sur-este del país.
Estas muertes son por lo general decidididas por un consejo de familiares que se componen de los ancianos de la familia. Las cifras oficiales del estado hay más de 200 asesinatos este año, alrededor de la mitad de todos los asesinatos en Turquía.