| Denunciante Avanzado
 |  Respuesta: 12 Casos terroríficos de exorcismo...
Parte I: El exorcista mayor: Jesucristo contra los demonios (33 A.C.) 
Los ejemplos se multiplican en el Nuevo Testamento, donde Jesús hace el papel de exorcista dedicado a expulsar los demonios de varias personas: i formas por la acción do una fuerza maligna Un ; por los evangelios del Canon lo confín • y a lo largo de los siglos ha justificado la práctica del exorcismo en la Iglesia católica.
En Mateo hallamos varias situaciones de ese tipo. El pasaje más llamativo narra el encuentro de Jesús, en tierra de los gadarenos, con "dos endemoniados que salían de los sepulcros, violentos en extremo, de manera ejue nadie podía pasar por aquel camino". Los demonios le rogaron que, si iba a expulsarlos de los cuerpos de aquellos dos hombres, los enviara a una manada de cerdos que estaba paseando por allí. Bastó una breve palabra de Jesús para echarlos: "Entonces Él les dijo: ¡Id! Y ellos salieron y entraron en los cerdos; y he aquí que la piara entera se precipitó por un despeñadero al mar, y perecieron en las aguas" En otros pasajes del mismo evangelio, Cristo cura a lunáticos y mudos poseídos por las fuerzas del mal.
En Marcos los ejemplos son menos, pero hay uno destacado, del que soto conocemos lo mínimo "Y después de haber resucitado, muy temprano el primer día de la semana. Jesús se apareció primero a María Magdalena, de la que había echado fuera siete demonios" Por Lucas sabemos que el mismísimo Satanás poseyó a Judas para orillarlo a cometer su traición: "Entonces Satanás entró en Judas, llamado Iscariote, que pertenecía al número de los 12" En tras pasajes de Juan aprendemos que. curiosamente, tos judíos creían que Jesucristo era quien estábil poseído por fuerzas del mal: "La multitud le dijo ¡llenes un demonio!"
Los casos de ix>scsión y tos respectivas exorcismos prosiguen en Hechos de tos Apóstoles. Los alumnos de Jesús habían recibido sus instrucciones i)ara expulsar a tos demonios en su nombre y así lo hicieron en varias ocasiones. Uno de tos casos más notables es el de Felipe de Samaría "Y las mulütuc.k.s unánimes prestaban atención a lo que Felipe decía, al oír y ver las señales que hacia. Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, éstos salían de eltos gritando a gran voz; y muchos que habían sido paralíticos y cojos eran sanados. Y había gran regocijo en aquella ciudad"
Por su parte. Pedro explica que Jesús era un genuino exorcista: 'Vosotros sabéis cómo Dios ungió a Jesús de Nazarea con el Espíritu Santo y con poder, el cual anduvo haciendo bien y sanando a todos tos oprimidos por eJ diablo: porque Dios estaba con Él" El Libro del Apocalipsis, que cierra el Nuevo Testamento, asegura que Babilonia es hogar de los demonios: "Y clamó con potente voz. diciendo: jCayó. cayó h .ii.in Babilonia? Se ha convertido en habitación de demonios, en guarí da de todo espíritu inmundo y en guarida de toda ave inmunda y aborrecible". Es el caso de una ciudad entera poseída por las fuerzas del mal.
Parte II: Epidemias conventuales.
Histeria entre las monjas (1491 y 1550)
En los albores de la época moderna en la que sucesió a la Edad Media, en diferentes conventos europeos se suscitaron episodios de histeria colectiva asociados a posesiones satánicas Uno de los más memorables ocurrió en Cambrai. al norte de Francia, en 1491. Todo empezó con los gritos y las noches do insomnio de una monja del convento local llamada Jeanne Potiére. que pronto 'contagió' a las compañeras de su orden. Éstas andaban semidesnudas, se trepaban a los árboles, se lanzaban por las ventanas y producían extraños sonidos propios do animales.
Alarmadas por los hechos, las autoridades locales intentaron curarlas a través de tratamientos médicos, oraciones y exorcismos, pero ninguno de esos recursos surtió efecto. Se cuenta que, sorpresivamente, el demonio habló a través de una de las víctimas Reveló que Potiére lo había invitado al convento, que eran amantes desde que ella tenia nueve años y que por las noches realizaban actos infames de sodomía. Con base en ese testimonio la condenaron a prisión perpetua y murió, recluida, a los cuarenta años.
En 1550 estudió una presunta posesión colectiva que estaba ocurriendo en el convento de Uvertet, Países Bajos. Inició como una serie de curiosas travesuras: durante la hora de los alimentos alguien movía de su lugar los platos que se hallaban sobre la mesa y cambiaba los objetos de lugar Sin embargo, poco a poco las manifestaciones se hicieron más agresivas: las monjas convulsionaban, se elevaban jx>r el aire y se movían con agilidad de fieras.
Wyor consideró los antecedentes del caso y observó que, con motivo de la cuaresma, las monjas se habían alimentado con sopa de rábano a lo largo de 50 días; consumido a gran escala, este vegetal puede ocasionar convulsiones. Otro (actor que podría explicar tales hechos os que los conventos de la época servían para que las familias poderosas aislaran y ocultaran a las jóvenes que habían perdido la virginidad, estaban embarazadas o eran indeseab, por cualquier motivo. Estas chicas, sin una vida sexual normal, bajo una dieta restrictiva y sometidas a arduas penitencias, bien podían ser víctimas de una enfermedad mental con extrañas manifestaciones. Hoy sabemos que los conventos femeninos son un terreno fértil para la histeria. El doctor Wyer, no obstante, concluyó que tanto en Cambrai como en Uvertet el demonio había entrado en acción.
Parte III: Un asunto político:
Las endemoniadas de Loudun (1633)
El caso más famoso de una presunta posesión satánica colectiva ocurrió en el convento de las monjas ursulinas de Loudun, una pequeña ciudad situada al noroeste de Francia que hoy tiene menos de diez mil habitantes. En el otoño de 1632 las 16 religiosas que se hallaban bajo el mando de la superiora madre» Juana de los Ángelus, comenzaron a percibir apariciones sobrenaturales. Las reportaron al padre Mignon. el director espiritual que había aceptado ese cargo cuando Urbain Grandier. el párroco local, lo rechazó. Grandier era un personaje controversial por su Apostura y la fuma de Don Juan que había adquirido gracias a sus recurrentes lances amorosos con mujeres de la localidad.
El padre Mignon llamó a otros sacerdotes d» ¡ M : toquias cercanas para dar inicio a un proceso de exorcismo. Durante éste las monjas gritaban, chillaban y aseguraron tener sueños eróticos. En más do una ocasión hacían propuestas sexuales a los curas que estaban tratando de exorcizarlas mediante lavados vaginales con agua bendita. Finalmente revelaron que eran presas de Asmocieo y Zabulón, dos demonios referidos en el Antiguo T toque habían entrado al convento ocultos en un ramo de rosas que el padre Grandier había arrojado por encima del muro que lo protegía El sacerdote negó la acusam y recuní i las altas autoridades eclesiásticas para detener los exorcismos, que se interrumpieron el 21 de marzo de 1633.
Los enemigos de Urbain Grandier siguieron intrigando en su contra y llegaron incluso hasta el poderosísimo cardenal Richelieu. quien era el primer ministro del rey Luis XÜI. Entre éste y Grandier hnbin ante de enemistad, pues Grandier se había opuesto al proyecto de Richelieu para demoler la fortaleza de Loudun Aprovechando el clima general de histeria que dominaba a la población. Grandier fue arrestado. Lo sometieron a torturas para que confesara haber enviado a los demonios al convento Aunque nunca aceptó haberlo hecho, fue ejecutado en la hoguera el 18 de agosto de 1634.
Muchos especialistas se han interesado en este •: iso. En 1952 el escritor inglés Aldous Huxley publicó el libro Los Demonios de Loudun. el estudio más importante de los hechos Éstos han sido adaptados al cine en dos ocasiones Madre Juana de los Ángeles (1961). de Jerzy Kawalerowicz, y Los Demonios, (1971), de Ken Russell Hay también una ópera, llamada Los diablos de Loudun (19681969), del compositor polaco Krzystof Penderecki. De acuerdo con la visión contemporánea, lo que ocurrió en Loudun fue un episodío más de historia colectiva que se aprovechó con fines políticos para eliminar del paisaje a Urbain Grandier
__________________ "Todos los que parecen estúpidos, lo son y, además también lo son la mitad de los que no lo parecen." |