Los nuevos mercados no se dan de un día para otro
LA DIVERSIFICACIÓN DE acuerdos comerciales es una apuesta que desde hace varios años adelanta el Gobierno. Aunque se ha avanzado, todavía hay una fuerte dependencia. Ministro Plata confía en que el comercio se mantenga.







Conseguir mercados para remplazar los existentes no es un proceso fácil, que sucede de un día para otro.

Así lo entienden el Gobierno, los empresarios y los analistas que señalan que lo que hoy se está viviendo es consecuencia de una concentración de las ventas a uno o dos países, por lo que es urgente avanzar en la diversificación de mercados.

De acuerdo con María Elvira Pombo, presidenta de Proexport, de las 11.061 empresas exportadoras de Colombia, 1.457, es decir el 21 por ciento, sitúan sus productos en Venezuela.

Y la situación se complica al señalar que 1.653 compañías más (24 por ciento) y 628 (9 por ciento) concentran sus exportaciones en Estados Unidos y Ecuador, respectivamente.

"El reto es incrementar las exportaciones no tradicionales de valor agregado aumentando el portafolio de mercados de las empresas, que minimicen el riesgo ante cambios drásticos del entorno", como el ocurrido recientemente con Venezuela, dice Pombo.

El ministro de Comercio, Luis Guillermo Plata, confió en que no se alteren las relaciones comerciales por el impasse, el más reciente de una relación de altibajos entre Chávez y Uribe.

"Hemos tenido situaciones similares en el pasado, (y) el comercio ha seguido creciendo", dijo Plata, tras explicar que en la relación de interdependencia de las dos naciones no es fácil para Colombia buscar mercados alternos ni para Venezuela encontrar proveedores "de la noche a la mañana".

Por su parte el ministro de Agricultura, Andrés Fernández Acosta, manifiesta que el enfrentamiento político no debería estar relacionado con el tema comercial.

"En la parte comercial haré esfuerzos con mis homólogos en Venezuela y haremos esfuerzos muy grandes en el sector privado venezolano y el sector privado colombiano, que necesitan uno del otro para que la relación comercial no se vea afectada por los problemas políticos".

Los negocios manufactureros, tales como textiles, calzado, cuero, confecciones, alimentos, productos químicos, automotores y papel, se constituyen en las actividades económicas que más se afectarán con la decisión.

Ante la situación, los empresarios deben explorar otras posibilidades de mercado, una tarea que puede tardar meses y que sin duda, afectará los resultados de las organizaciones que se han visto golpeadas por el menor consumo en el mercado local y la revaluación del peso.

Por eso, reitera María Elvira Pombo, el Gobierno hace ingentes esfuerzos por firmar acuerdos comerciales con otras naciones de varias latitudes. Por ejemplo, ya se terminaron o se ultiman detalles en acuerdos con Chile, el Triángulo Norte de Centroamérica, Canadá, el Efta y la Unión Europea.

Ese tipo de estrategias permitirá que la economía nacional no quede tan vulnerable ante la caída de un solo socio comercial como Venezuela.