Dos nuevos dirigentes políticos, esta vez del Chocó, están en la mira de la Corte Suprema de Justicia. Se trata de los representantes a la Cámara por el Chocó Odín Sánchez y Édgar Ulises Torres a quienes un desmovilizado del ELN señala de haber tenido nexos con ese grupo armado ilegal.
Según las versiones que han trascendido a los medios de comunicación, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia le pidió que la Fiscalía General de la Nación que le envíe los testimonios que vinculan a Sánchez y Torres con ese grupo armado ilegal.
Este es el primer paso para que la Corte defina si hay o no mérito para abrir una investigación formal en contra de los dos parlamentarios.
Hasta el momento, Édgar Ulises Torres ha negado cualquier tipo de relación con el Ejército de Liberación Nacional -ELN-.
Según Torres, tanto él como su familia han estado amenazados por esa guerrilla, por lo cual desestima cualquier tipo de nexo. Como nuestra de ello ha señalado que durante el 2007 ellos (su familia) no han podido ejercer su derecho al voto debido al cerco tendido por el ELN en el Medio San Juan.
El guerrillero
La decisión en contra de los dos representantes a la Cámara por el Chocó, tiene lugar debido a las declaraciones entregadas por Luis Omar García Argüelles, un desmovilizado del ELN y a quien las autoridades señalan de ser jefe de finanzas de ese grupo armado ilegal en el Chocó.
Este hombre señaló durante una versión libre ante un fiscal de Justicia y Paz, que esa guerrilla apoyó al representante Édgar Ulises Torres.
Según se conoció, ese apoyo habría consistido en constreñir y pagarles a los habitantes de diferentes municipios para que votaran a su favor.
Esta es precisamente la versión que revisará la Corte en los próximos días. Por esa razón, el Alto Tribunal le pedirá en las próximas horas al Congreso que certifique la calidad de congresistas de Torres y Sánchez.