El país oceánico se está quedando 'seco' por falta del género masculino · Muchos se han ido por trabajo u otros motivos · Según un estudio, hay casi 100 mil mujeres más que hombres.

En Australia hay sequía, y parece que no se trata de algo tan generalizado como la falta de agua.
Según una información de la BBC, lo que necesita el país en estos momentos son hombres, nada menos.

Miles de hombres australianos, entre los 20 y los 30 años, han salido del país para trabajar o viajarBien puede parecer que nos remontamos a la época en que los pueblos españoles organizaban caravanas de mujeres para repoblar los lugares más recónditos de España, algo que, por cierto, aún hoy se sigue haciendo. Pero, nada más lejos de la realidad. Y es que se trata de Australia, el sexto país más vasto del mundo y uno de los que menor densidad de población tiene de los desarrollados.

A pesar de ello, un análisis del último censo realizado en el país oceánico muestra que hay casi más de 100.000 mujeres que hombres.


Al parecer, dicho fenómeno se debe a que miles de hombres australianos, entre los 20 y los 30 años, han salido del país para trabajar o viajar. El problema es peor aún en las ciudades costeras, adonde se mudaron gran cantidad de mujeres en busca de mejores trabajos y de estilos de vida.

Consecuencias de largo alcance

La situación ha causado una descompensación de género que está provocando consecuencias de largo alcance. Bernard Salt, demógrafo, dice que el éxodo de hombres jóvenes hacia otros países está dejando su marca.

"Si vas a los censos de Emiratos Árabes Unidos, encontrarás que hay unos 12.000 australianos viviendo en Dubai, la mayoría del sexo masculino, y en el grupo de entre 25 a 34 años".

"Éste es un ejemplo de un país que ha atraído a un específico grupo demográfico desde Australia, lo que ha contribuido a la ´sequía de hombres´", explica Salt.

El alcalde que pedía "mujeres feas"

Precisamente, no hace mucho sucedía lo contrario en un pueblo, también australiano, en el que su alcalde se vio metido en una polémica al pedir "mujeres feas" para paliar el exceso de hombres en su localidad.