Uruguay sin Luis Suárez no tiene poder goleador. Paraguay a lo suyo: empatar para evitar a Chile.

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A Uruguay le bastó con el empate y jugaría ante Chile Uruguay y Paraguay terminaron 1-1 y se clasificaron a los cuartos de final de la Copa América. El celeste jugará contra el local Chile en la segunda fase. ENRIQUE DELGADO Chile 20 de junio de 2015 16:08h COT El encuentro entre Uruguay y Argentina terminó en empate. | JUAN MABROMATA Carlos Sánchez cambió las pelotas divididas por la claridad para Uruguay. En medio del choque físico se animó a dar más de dos pases seguidos para romper así la falta de ideas de un partido brusco, que a los 9 minutos de juego ya tenía a dos jugadores amonestados: Hernández por los celestes y Ortigoza por los paraguayos. Desde el centro y hacia el costado derecho, Sánchez recuperó, avanzó, buscó a Maxi Pereira y lanzó centros al área que complicaron. Desde un córner que tiró ,llegó el primer gol de su equipo. Giménez apareció en el punto penal, atacó la pelota desde atrás para marcar de cabeza el 1-0 a los 28 minutos. En el segundo tiempo, los técnicos enviaron a Derlis por Bobadilla y “Cebolla” Rodríguez por Sánchez. Uruguay aseguró la posesión del balón, atacó más e intentó romper la igualad con Cavani que está apagado, sin su poder letal. Tuvo su mejor opción en una media vuelta frente al arco que terminó en las manos de Villar. La albirroja, esperó en su campo para salir de contra y así buscar otra jugada de pelota quieta. Derlis,tuvo el de la victoria con un derechazo de media distancia que salvó Muslera. El campeón está clasificado y como lo reitera su técnico Oscar Tabárez, los equipos se van ajustando durante el torneo. Ya encontró el mejor nivel de Carlos Sánchez; en el medio con su dinámica, le dio juego a Uruguay, pero deberá mejorar en el fútbol aéreo, pues recibió dos goles por esa vía. En tanto en Paraguay hay alarma por la lesión de Ortigoza, el motor del equipo que dejó la cancha a los 62 por un posible desgarro. Segundo del grupo con cinco puntos, se metió en los cuartos de final, una campaña que por ahora deja sin argumentos a los que no creían.

Fuente: As