Creo que leyó de prisa, porque las respuestas se encuentran en el texto. La misión de Velásquez no fue investigar a Uribe, ni tenía por qué hacerlo, ni lo hizo tampoco. Su misión y la del cuerpo de investigadores fue destapar la olla podrida de la política y el paramilitarismo en lo que tiene que ver con los funcionarios aforados cuya competencia en materia penal le corresponde a la Corte Suprema, y lo hicieron tan bien que ahí están los resultados. La mayor parte de los nexos se establecieron y fueron decenas las condenas de parlamentarios por estos delitos.

De otro lado, y también se expresa en el artículo con claridad, Uribe se inventó que lo querían involucrar y fabricó él (o sus asesores) el complot contra la Corte Suprema y contra Velásquez, que nunca existió porque la hipótesis de investigación estaba dirigida hacia terrenos y protagonistas distintos y si alguna línea de investigación se desprendía de allí, le correspondía a otra autoridad adelantarla y no sé si en ese caso se ofició a la Comisión de absoluciones para lo de su cargo.

Que la conspiración contra la Corte se produjo no es un invento. Ahí están los procesos, ahí están las condenas, todo esto como resultado de las investigaciones de Velásquez, así como el derrumbamiento del complot que se quiso montar en su contra, lo que también está demostrado en los procesos.