Lo dicho. No importa lo que haya ganado en el pasado, ni la décima champion, ni la Copa Confederaciones, los últimos fracasos en un club como el Madrid no se le perdona a nadie. Ancelotti lo sabe y en las entrevistas posteriores al partido con la Juventus, dejó ver lo que le espera. Quiere continuar pero sabe que está de salida.

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"Mi futuro está decidido: me gustaría quedarme aquí, pero sé cómo son las cosas del fútbol. Un club tiene el derecho de despedir al entrenador si no está contento".

Su gran pecado, las rotaciones. Su ambición de ganarlo todo lo llevó a exigir demasiado a la plantilla titular y de ahí la plaga de lesiones y su poca confianza en los suplentes que, sin minutos, no pudieron tapar los huecos.

El Madrid necesita un chivo expiatorio y Ancelotti es el indicado. En un par de semanas se sabrá su suerte. La mayor parte de la hinchada quiere que se quede. Ojalá le den la oportunidad. Se lo merece.

Por lo pronto solo hay dos cosas ciertas, tiene contrato hasta 2016 y en principio las directivas lo tranquilizaron, pero sólo podrá irse a pasar en paz sus vacaciones cuando Florentino le confirme personalmente su continuidad.

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EL TÉCNICO QUEDA TOCADO TRAS EL VARAPALO EUROPEO Ancelotti, en el aire Carlo Ancelotti quiere seguir en el Real Madrid, pero el club se cuestiona su continuidad y estudia el mercado en busca de un sustituto J. F. DÍAZ Y R. JIMÉNEZ. MADRID 15/05/15 - 16:06. El día después llegan las preguntas. Con el fracaso aún reciente y con pocas horas de sueño, el ‘qué pasará’ acecha en las esquinas de la mente. La incertidumbre que rodea al madridismo a estas horas es saber quién será su entrenador la próxima temporada. Si será Ancelotti o si la Juventus fue su verdugo final. Después de una temporada en la que se esperaban seis títulos y en la que se han celebrado dos, la Supercopa de Europa, ya en un lejano agosto, y el Mundial de Clubes, ante dos rivales menores, la palabra fracaso es inevitable en un transatlántico como el Real Madrid, cuya sala de trofeos pasa hambre si no recibe su dosis cada temporada. En el club no se tiene seguridad plena en que Ancelotti vaya a conservar un puesto de trabajo en el que se ha mantenido un año más gracias al gol de Ramos en el minuto 93 de la final de la Champions del curso anterior. No ha ganado ninguna de las dos Ligas que ha disputado, un hecho que se valora negativamente. Pero tampoco está despedido. Al italiano le tranquilizaron tras la eliminación europea. Ancelotti quiere seguir. Pero las dos próximas semanas de reflexión del presidente serán cruciales para el futuro de Carletto en el Madrid. Cuenta con el aval de la Décima y de haberse quedado cerca de repetir final, pero en el Madrid el ayer no cuenta y el último partido es que el importa. Con el mal sabor de boca, su futuro está en el aire. Un 'debate' a tres bandas Ancelotti cuenta con el apoyo de la plantilla, que se ha manifestado públicamente a favor de la continuidad de su entrenador, incluso después de la eliminación europea. Y el italiano ha reiterado su intención de seguir en Chamartín la temporada que viene. Pero con dos ruedas del triciclo bien ajustadas aún puede haber problemas. El club tendrá la última palabra, en unos días, cuando se cierre el curso actual, sobre qué pasará a partir de verano.

Fuete; Marca